25.000 parados menos en España si no existiera la piratería
La ilegalidad de los contenidos digitales alcanza el 83% del total
El mismo día en que Google hacía pública la desaparición, el próximo 15 de diciembre, del agregador de noticias Google News se conoce que en nuestro país existirían alrededor de 25.000 trabajadores menos en paro si no existiese la piratería. Una lacra contra la que luchan instituciones públicas y organismos privados.
De hecho, las pérdidas que en España genera la piratería en pymes y grandes empresas ha impedido la contratación directa de 19.000 personas, cifra que escala hasta las 25.000 si se tienen en cuenta los contenidos digitales.
Son datos proporcionados por Josep Coll Rodríguez, fundador de Red Points, empresa tecnológica conocida a nivel internacional por su lucha a favor de la protección de los contenidos digitales y contra la piratería. En una entrevista con Territorio Pyme Coll ha destacado las “enormes” pérdidas que supone este fenómeno dentro de nuestras fronteras, pues son afectadas por distintos factores.
Entre ellos, ha señalado que España es el segundo país que mayor cantidad de contenidos ilegales consume u ofrece al mundo. Una cultura “del todo gratis” que se ha extendido y que a día de hoy supone la ilegalidad del 83% de los contenidos digitales que se consumen a través de Internet.
“Hay que tener en cuenta que existe una industria parasitaria paralela que se nutre de estos contenidos y los expone en webs con banners de publicidad, de empresas que solo quieren tener retorno y no les importa dónde esté dicho banner. Esto ha ocasionado que ofrecer contenidos digitales ilegales sea un jugoso negocio”, ha agregado.
Líder en falsificaciones
En este sentido, el directivo de Red Points ha concretado que solo en el sector de la industria del cine española la inexistencia de piratería generaría puestos de trabajo directos a 19.000 personas, un lastre que solo en 2013 causó pérdidas de aproximadamente 1.200 millones de euros.
Asimismo, nuestro país ocupa el cuarto puesto dentro de la Unión Europea en lo que a aceptación de productos falsificados se interceptan, únicamente superado por Alemania, Italia y Grecia. Así, aparatos electrodomésticos, tabaco, artículos de vestir y alimentos y bebidas no alcohólicas son los productos que mayores falsificaciones concentran.
Un movimiento que en España mueve anualmente alrededor de mil millones de euros y que, solo en 2012, fueron interceptados alrededor de 40 millones de productos falsificados cuyo valor superaba, de nuevo, los mil millones de euros.