Las siete claves sobre los seguros de ahorro
1. Rentabilidad
Los seguros de vida-ahorro tienen un horizonte temporal superior a los depósitos. Los expertos recomiendan hacer aportaciones que se puedan mantener más allá de cinco años. Hoy por hoy, el rendimiento que ofrecen está entre el 1,5% y el 2%. Habitualmente, el interés garantizado se revisa trimestralmente, aunque no suele haber grandes cambios.
2. Comisiones
Es uno de los principales factores a tener en cuenta. La entidad o el agente comercializador puede cobrar y también la aseguradora por la gestión. Si las tarifas son caras, pueden dejar en nada el tipo de interés ofrecido.
3. Disponibilidad
Casi todas las aseguradoras incorporan en sus contratos de seguros de vida-ahorro cláusulas para penalizar la retirada de la inversión fuera de los plazos marcados. Esto puede provocar que una disposición temprana del dinero nos haga perder dinero.
4. Fiscalidad
De cara a Hacienda, depósitos y seguros de ahorro tributan igual cuando estos últimos se rescatan en forma de capital. Están sujetos al IRPF, como rendimiento del capital mobiliario, con tipos que van del 21% (para los 6.000 primeros euros de rendimientos), hasta el 27% (a partir de 24.000 euros de ganancias). En cambio, sí que hay diferencias si el tomador recupera el seguro en forma de renta vitalicia, ya que podrá beneficiarse de una exención fiscal que aumenta cuanto mayor es su edad.
5. Asesoramiento
Dada la complejidad inherente a algunos de los seguros de ahorro comercializados, la diversidad en los plazos y condiciones y la falta de un índice de rentabilidad común, es conveniente contar con el asesoramiento de un experto de cara a la contratación.
6. Inversión mínima
Prácticamente todos los seguros de ahorro que se comercializan exigen un desembolso mínimo de más de 2.000 euros. En otros casos, piden un compromiso de aportaciones mensuales o trimestrales.
7. Garantías
Los seguros de ahorro garantizan el 100% del capital invertido, una vez descontados los gastos. El respaldo para recuperar esa inversión está en solvencia del grupo asegurador que lo comercializa.