Soria prevé un año turístico récord, con tres millones de visitantes más
España cerró el pasado ejercicio con un récord en llegada de turistas extranjeros. En 2013, 60,6 millones optaron por España como primer destino para pasar sus vacaciones. Esa dinámica se ha mantenido en los tres primeros meses del año, con un incremento anual del 7,2%, lo que le permitió el viernes al ministro de Industria, Turismo y Energía avanzar que este año podría culminar con una ganancia de tres millones de turistas internacionales y así llegar a los 63,6 millones de visitantes extranjeros. “Para abril se estima que el crecimiento ha podido ser superior incluso a un 10% y en el año 2014 podría concluir con un crecimiento similar al que a nivel internacional hubo el pasado año, por tanto en el entorno de un 5%”, avanzó Soria en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, en el que se analizó un informe sobre la evolución de la coyuntura turística.
El ministro certificó que la tendencia de recuperación del turismo nacional exhibida en los últimos meses del pasado ejercicio y en los dos primeros de este año tiene visos de consolidarse. “El mercado turístico nacional continúa la senda de la recuperación, lo que le llevaría a finalizar el año con nuevos récords gracias a la mejora de las perspectivas económicas”. El Ejecutivo confía que el crecimiento económico atisbado en los tres últimos trimestres tenga su reflejo en una mejora del consumo de los hogares. Soria explicó que los viajes de los españoles se han visto influenciados en los últimos años por unas condiciones económicas negativas (repunte del desempleo, restricción crediticia o rebajas salariales), pero que desde agosto del pasado año se ha observado una tendencia favorable en el turismo nacional “que está claramente en vías de recuperación”.
Con todo ello, el ministro confió en que la mejoría del turismo nacional que se viene registrando desde agosto del pasado año también tenga su reflejo en los pagos que realizan los españoles en los viajes al resto del mundo que están aumentando desde el mes de junio de 2013. “Lo cual quiere decir que el turismo español no solo mejora de cara al turismo nacional, sino también al turismo internacional. Es decir los españoles están viajando más”, explicó Soria. En 2010, los españoles que viajaron a otros destinos internacionales gastaron 12.662 millones de euros. Una cifra que fue descendiendo paulatinamente en 2011 (12.349) y en 2012 (11.912) y que se ha recuperado en 2013 hasta los 12.248 millones.
La consolidación como segundo destino mundial por ingresos y el tercero por número de visitantes para este año se basaría en la fortaleza de España, respaldada por los grandes mercados emisores, y la debilidad de algunos mercados competidores de sol y playa. La llegada de turistas internacionales a Egipto sigue en caída libre, muy afectada por el conflicto que asola al país desde hace más de tres años, y las de Chipre también están en tasas negativas. Al mismo tiempo otros enclaves como Túnez y Turquía crecen a un ritmo menor que el nuestro.
Entre nuestros grandes mercados emisores destaca la fortaleza de los tres grandes (Reino Unido, Alemania y Francia), que suponen más de la mitad de los turistas extranjeros recibidos. Las previsiones para la próxima temporada alta son muy optimistas.
Los datos que maneja Turespaña muestran que las reservas de paquetes turísticos por parte de turistas británicos mostraban a finales de marzo un incremento del 3%, en línea con lo que está sucediendo en el resto de mercados, lo que le permitiría seguir manteniendo la cuota del 34,7%. Otro dato que avala las buenas perspectivas turísticas es la previsión de reservas en Alemania para el verano, el segundo mercado más importante, con un avance del 6% frente al 3,7% de Turquía.
Francia, el tercer mercado por turistas recibidos, que en algunos meses incluso ha superado a Alemania, es el que muestra una mayor mejoría. Las reservas para España de mayo a octubre habrían crecido un 7%, según los datos de la Asociación Francesa de Touroperadores, todo lo contrario que lo acontecido en otros países como Túnez, Marruecos o Turquía, con caídas significativas. Los viajes a Egipto siguen desprogramados.