Schindler prevé estabilizar sus ingresos antes de 2016
"España es uno de los países más importantes de Europa, así que, simplemente por su peso específico, tiene que ser un buen destino para una multinacional que quiere estar en todos los mercados”, afirmó en una entrevista con CincoDías, el director general de Schindler Iberia, Carlos Guembe. Y señaló que España es un buen destino de inversión para las grandes empresas globales.
Guembe explica que la filial española, al igual que en el resto de los países del mundo, no publica información y, además, las cuentas del ejercicio pasado aún no están cerradas con el consejo de administración, aunque “en grandes números, 2013 ha supuesto una caída de ingresos frente a 2012, ya que el mercado es pequeño y la presión de los precios es muy grande, pero estimamos una estabilización de ingresos, como máximo, en los dos o tres próximos años”.
A nivel global, Schindler ha obtenido en 2013 unos ingresos de 8.813 millones de francos suizos (7.227 millones de euros) –superiores en un 8,5% frente al ejercicio anterior–, con un beneficio neto de 463 millones de francos suizos (379 millones de euros). La compañía ha aumentado en un 7% los pedidos recibidos, y en un 14% la cartera de pedidos.
El grupo tiene en marcha proyectos en China, Holanda, Polonia, EEUU y Canadá, entre otros países
Como consideración de qué aporta España a las empresas, “lo más importante que ofrecemos es el capital humano, Schindler España está expatriando con gran éxito al mundo entero gente de todos los niveles profesionales”, destaca Guembe. Y explica que la firma no solo envía fuera a montadores de ascensores, “lamentablemente no tenemos trabajo para ellos dentro de España”, pero trabajan en empresas del grupo en todo el mundo, “y en todas partes donde van, demuestran que son los mejores montadores jamás vistos”. El director general de Schindler para España y Portugal declara que los trabajadores españoles son extraordinarios por su “altísimo” grado de compromiso y profesionalidad.
Asimismo, el fabricante de ascensores de origen suizo exporta directivos, quienes tienen altos cargos en diferentes empresas del grupo –actualmente, una decena–. De hecho, la multinacional acaba de ganar la segunda fase del proyecto saudí Wahat Makkah (en La Meca), que incluye 214 ascensores de su modelo 3300. Además, el grupo tiene en marcha una serie de proyectos en China, Holanda, Polonia, EE UU y Canadá, entre otros.
El responsable aclara que, por su experiencia como director general del fabricante de ascensores en Portugal, tuvo que hacer frente a la recesión lusa desde 2002. Esto hizo que, cuando Guembe llegó a España en 2006, ya se adelantó a la crisis y empezó a “tomar muchas medidas a efectos de adelgazar, ser más productivos, y tener un control de crédito muy exigente”. En 2014, Schindler España ha sido reconocida como la mejor filial del grupo.
Investigación
Schindler participa en el proyecto Solar Impulse 2, un avión que no necesitará ningún tipo de combustible para volar. El fabricante de ascensores apoya la idea de que “todo puede funcionar mucho más racionalmente desde el punto de vista de la energía”, en palabras de Guembe.
Este proyecto tiene una aplicación en los ascensores. “Nosotros estamos próximos a lanzar de forma comercial el elevador solar –que ya tenemos funcionando en prototipos–, que supondrá un avance gigantesco desde el punto de vista de la eficiencia energética de los ascensores en aquellos lugares donde no hay acceso a la electricidad”, subrayó.
¿Es cualquier técnico capaz de reparar ascensores?
La CNC impuso en el mes de septiembre de 2013 multas a cuatro fabricantes de ascensores –entre ellos, Schindler– por afirmar que las empresas que se dedican en exclusiva al mantenimiento de ascensores (y no a su fabricación) carecían de los medios, la formación adecuada y las medidas de seguridad para poder llevar a cabo su trabajo con éxito.
Al ser preguntado por esta cuestión, el director general de Schindler Iberia explicó que la institución –garante de una libre competencia real y reguladora de los mercados españoles, ahora integrada en la CNMC– “está ahí para bien, y eso es evidente”. Y añadió que “una empresa de mantenimiento de ascensores, siempre que tenga buenos técnicos, es perfectamente capaz de hacer su labor”, pero que una empresa que revisa sus propios dispositivos tiene “un nivel de formación que puede ser superior a aquellas que mantienen los sistemas fabricados por terceros”. Guembe insistió en que un buen técnico es válido para mantener cualquier tipo de ascensor, pero, según él, podría haber una pequeña diferencia, ya que los profesionales formados en una tecnología específica serán “más productivos y rápidos resolviendo problemas”.
Asimismo, el director general de Schindler Iberia destacó que la firma a la que representa en España y Portugal mantiene una cartera de ascensores “de las más diversas marcas –Raloe, entre otras–, a las que damos servicio de manera perfecta”.