“Abogado y procurador no deberían ser áreas distintas”
El veterano abogado ha sido galardonado en el año del trigésimoquinto aniversario de su despacho con el premio Jaén, paraíso interior por “contribuir a aumentar el conocimiento y la promoción de la provincia fuera del territorio jiennense”.
Pregunta. Se cumplen 35 años desde que abrió el primer despacho en Jaén, es un ejemplo de emprendedor. Ahora tienen 300 empleados y presencia en toda España y en América Latina
Respuesta. Empezamos en Jaén, después seguimos en Madrid, y ahora tenemos nueve sedes estratégicamente situadas en diferentes comunidades autónomas. Tenemos clientes en todos los sectores: en la comunicación, en la banca, en eléctricas, etc. Por eso, tenemos la obligación de estar en todas las plazas más importantes para controlar tanto cuestiones jurídicas como de procuradores.
P. ¿Es el mercado latinoamericano un destino natural de desarrollo para los españoles?
"Actualmente, vivimos una globalización en todos los sentidos, y los profesionales deberían tenerla muy en cuenta a la hora de trabajar”
R. Es un mercado muy difícil. Empecé en Sao Paulo en 2003, pasé unos seis años allí, pero lo dejé porque, incluso entre profesionales, es muy complicado, además con el añadido del idioma. Después me replegué hacia México, que es donde tenemos nuestro espacio propio y desde donde controlamos Brasil y Colombia. Vamos a México una vez al mes y tenemos una relación muy fluida con nuestro despacho de allí.
P. ¿Cuáles son los principales cambios que ha visto usted en el ejercicio de la abogacía durante estos 35 años?
R. Antiguamente, el abogado ponía una placa en su despacho y tenía clientes. Ahora ha avanzado todo tanto que, además de hacer tu trabajo bien, tienes que tener presencia en los medios. Los abogados somos imprescindibles en todo. En el mundo globalizado en que vivimos, es necesario estar en todas las áreas de la abogacía: civil, penal, procesal, etc.
“Los valores fundamentales para nosotros son la lealtad con el cliente, el respeto hacia él y el hacer nuestro trabajo bien hecho”
P. Han sido distinguidos por Global Law Experts. ¿qué es lo que les diferencia?
R. Este despacho tiene una serie de valores: la lealtad con el cliente, la cercanía hacia él y el trabajo bien hecho. Soy muy exigente y, si me equivoco alguna vez, lo que hago es rectificar al día siguiente.
P. El anteproyecto de ley de servicios y colegios profesionales elimina la incompatibilidad entre abogado y procurador. ¿Cómo afecta a su despacho?
R. Yo siempre he defendido que el abogado pudiera representar al cliente porque es quien hace el trabajo y tiene la misma cualidad, pero siempre defenderé la profesionalidad de los procuradores. Nos adaptaremos todos a la nueva situación. No deberían ser dos compartimentos distintos.
P. Como jurista, ¿Qué le parece la nueva ley de servicios profesionales? ¿Cómo afecta a las profesiones jurídicas? ¿Qué mejoras propondrían ustedes?
R. Hay mejoras que hacer siempre en todo, pero uno no se puede olvidar de que las leyes nunca se improvisan. Las leyes son el fruto de un largo proceso de trabajo en el que intervienen muchos actores. Además, con la globalización que estamos viviendo, todos los profesionales debemos adaptarnos a los tiempos que corren. Por ejemplo, ahora necesitamos pactar las minutas, que es algo que antes no se hacía. Tenemos que estar preparados para los cambios en las leyes y normas.
P. Medina Cuadros Abogados patrocina el premio de oratoria jurídica de la UAM, para fomentar las habilidades de futuros profesionales. ¿Qué es lo que necesita un abogado para ejercer?
R. Se necesita vocación, sentido común, amar el trabajo, tener una mente muy social –defender las injusticias como si las sufrieras tú– porque defiendes a personas. Hay que amar y respetar al ser humano por encima de todas las cosas. Todos debemos tener en mente la presunción de inocencia, que es un derecho reconocido por la Constitución española. Nos gustaría ampliar ese patrocinio porque queremos seguir ayudando a formar a profesionales.
Reflejo de la crisis económica en la abogacía
Manuel Medina admite que la crisis ha afectado a los despachos de abogados, pero se siente privilegiado porque sus clientes atienden bien a los pagos. Habla de empresas de primera línea que han llegado a concurso de acreedores y han tenido problemas de pago: “Si antes te pagaban a 60 días, ahora lo hacen a 120”. Afirma que lo más importante es estar pendiente del cliente y de la facturación.
En cuanto a los concursos de acreedores, Medina los compara con el sarampión: “Los había en muchas empresas”, pero afirma que los empresarios se han dado cuenta de que no es necesario llegar a concurso para poder salir a flote. Ahora, negocian con los proveedores y se les paga a 90 días. De esta forma, está bajando un poco el número de procedimientos concursales, pero no mucho “porque los concursos son como una fiebre. No es que disminuyan notablemente, pero sí se observa una contención”. Medina declara que estamos empezando a despegar y que deberíamos tener actitud positiva: “No podemos estar llorando todos los días a causa de la crisis”.
La idea de un bufete con líneas de negocio diferenciadas surgió mucho antes de la crisis. A partir del año 2000, empezaron a diversificar: entre otras, destaca Medina Cuadros Procuradores. Afirma que llevar un asunto de un cliente y tratarlo con un letrado y con un procurador, “al completo”, les está dando buenos resultados.
Dan cobertura a toda España gracias a la ley Omnibus y manifiesta que han sido pioneros en trabajar siguiendo estas directrices: “Estamos en toda España y ya no hay quien nos pare”.