La nueva regulación de pymes refuerza las ratios de solvencia de la banca
El objetivo de la Ley de Emprendedores, en vigor desde el pasado 29 de septiembre, es “suavizar los efectos de la restricción en el crédito sobre las empresas”, especialmente las pequeñas y medianas. La normativa pone en marcha diversas estrategias, entre ellas la de rebajar las obligaciones de capital exigibles en relación a los préstamos concedidos a las pymes.
Así, prestar dinero a las pequeñas y medianas empresas resultará a las entidades menos costoso en términos de capital. En concreto, consumirán un 23,8% menos de fondos propios. La buena noticia, para los bancos, es que este descuento tiene efectos retroactivos –sobre los créditos ya concedidos–, lo que ha tenido como consecuencia instantánea una mejora de las ratios de capital.
Los diferentes coeficientes de solvencia –hay varios, en función de qué incluyan– se hallan al dividir los fondos propios computables entre los activos ponderados por riesgo. Es en este último punto donde actúa la rebaja de exigencias aprobada por el Gobierno. Los activos ponderados por riesgo de Santander, BBVA, CaixaBank, Bankia y Sabadell se situaban en 1,14 billones a cierre del tercer trimestre del año, frente a los 1,18 billones a finales de junio.
“En teoría, el ahorro debería destinarse a dar más préstamos a las pequeñas y medianas compañías. En la práctica, es una ayuda muy propicia para las entidades financieras, que continúan con su particular carrera de obstáculos para cumplir con los requisitos de solvencia”, explica un analista.
El Banco de España también ha puesto su granito de arena, al modificar la circular de recursos propios mínimos para ampliar la definición de pyme. Así, más préstamos podrán beneficiarse del tratamiento favorable a efectos del cálculo de los activos ponderados por riesgo, explica el organismo regulador dirigido por Luis María Linde.
El cambio en la circular entró en vigor el pasado 12 de octubre pero tiene efecto sobre los estados que deban presentarse ante el Banco de España a partir de ese día. Al igual que la Ley de Emprendedores, su efecto es retroactivo.
Todos estos cambios contribuyen a hacer más eficaces las medidas de las entidades para mejorar sus notas de solvencia. El Banco Central Europeo (BCE) calienta motores para efectuar el próximo año los terceros test de estrés a la banca europea, en los que exigirá una ratio de capital del 8%. El próximo 29 de noviembre, además, las entidades sistémicas según la Autoridad Bancaria Europea (ABE) deberán enviar al Banco de España sus planes para cumplir con la tercera edición de las normas internacionales para la banca, conocidas como Basilea III. Estas serán aplicables al 100% en 2019 pero muchas de sus restricciones estarán en vigor a partir de enero.
Los bancos españoles, además de reducir los créditos, han bajado el peso en sus participadas financieras (CaixaBank, Bankia y BBVA), han emitido bonos contingentes convertibles (cocos) perpetuos (BBVA y Popular) y han ampliado capital (Sabadell) con el objetivo de mejorar sus ratios de capital.
Cómo le ha ido a cada entidad
Bankia
La entidad explica que la aplicación de la Ley de Emprendedores le ha permitido mejorar su ratio de capital en 17 puntos básicos.
BBVA
Los activos ponderados por riesgo de la entidad descendieron un 1,6% al cierre del tercer trimestre, hasta los 325.665 millones de euros, “debido principalmente a la depreciación generalizada respecto al euro de las monedas con mayor influencia en los estados financieros de BBVA”.
Sabadell
La entidad que preside José Oliu ha sido la que más ha mejorado su ratio de capital core, hasta el 11,4% desde el 9,61%, gracias a su ampliación de capital. Un portavoz de la entidad explica que la Ley de Emprendedores ha supuesto 18 puntos básicos.
Santander
La ratio de core capital de Santander ha pasado al 11,56% a finales de septiembre desde el 11,11% de cierre de junio. Sus activos ponderados por riesgo han descendido un 4%, a 502.297 millones.
CaixaBank
Sus activos ponderados por riesgo han bajado un 6,4%, a 141.425 millones. Su ratio de capital ha subido al 12,5% desde el 11,6%.