Claves para seguir la junta de Pescanova
Pescanova reúne hoy en la sede de la compañía en Pontevedraa sus accionistas. Estas son las claves para entender la importancia de la junta y en qué situación se encuentra el grupo gallego.
Orden del día. La junta de accionistas de Pescanova tendrá lugar en la sede del grupo en Chapela, Pontevedra, a las 12.30 horas. En la misma cesará la totalidad del consejo de administración, se nombrará un nuevo consejo y Deloitte, administrador concursal del grupo, informará sobre el estado de la empresa.
Situación del grupo. Pescanova se encuentra en situación concursal con más de 3.600 millones de euros de deuda y un agujero patrimonial de 1.667 millones, el mayor concurso de acreedores de una empresa española no inmobiliaria (solo por detrás, por cantidad de deuda, de los concursos de Martinsa Fadesa y Reyal Urbis). El juez del concurso, del Mercantil número 1 de Pontevedra, suspendió las facultades del consejo y nombró como administrador a la consultora Deloitte, designado como tal por la CNMV.
Consejeros. El expresidente de Pescanova, Manuel Fernández Sousa, primer accionista del grupo con el 7,5%, ya ha anunciado que no se presentará siquiera como consejero de la empresa; ha anunciado que informará sobre una propuesta del consejo en el transcurso de la junta a través de la sociedad Sodesco. Grupo Damm, segundo mayor accionista con el 6,2%, ya hizo pública su propuesta de consejo de administración, integrada por siete miembros, entre ellos representantes de los accionistas Luxempart e Iberfomento y José Carceller (los tres figuraban ya en el anterior consejo de la compañía); fuentes cercanas a la empresa controlada por la familia Carceller aseguran que más del 40% de los accionistas apoyará su propuesta. El fondo estadounidense Cartesian, con el 5% de Pescanova, apoyado por accionistas minoritarios representados por el despacho Cremades & Calvo-Sotelo, presentará su propuesta de consejo, formada por 15 miembros, entre ellos el expresidente de FCC, Baldomero Falcones.
Bancos acreedores. El futuro del grupo gallego depende básicamente de la disposición de los bancos acreedores a alcanzar un convenio que evite la situación concursal del grupo y la liquidación. Sabadell, con 226,7 millones, Popular, con 181,9 millones, CaixaBank, con 177,7 millones y Novagalicia, con 142,2 millones, son las principales entidades financieras acreedoras de Pescanova. Deutsche Bank, Bankia, BBVA y Banco Espírito Santo cuentan con más de 100 millones de deuda.
Próximo consejo. Tanto Fernández Sousa como Damm y el fondo Cartesian se han volcado en las últimas semanas en la búsqueda de apoyo a sus propuestas de consejo de administración entre los accionistas de Pescanova. Las facultades del consejo de la empresa están suspendidas por orden del juez del Mercantil número 1 de Pontevedra, pero los potenciales nuevos consejeros consideran que un nuevo equipo al frente de la empresa servirá para que el magistrado devuelva las facultades de administración al consejo. Este nuevo consejo de administración tratará de negociar con la banca acreedora un convenio de acreedores.
El futuro del grupo. El futuro de Pescanova pasa o por la liquidación o por un convenio que permita mantener la actividad del grupo. En el caso de que se opte por un convenio previsiblemente la banca acreedora intercambiará deuda por acciones y serán las entidades financieras las que controlen el capital de Pescanova, como ha ocurrido en el caso de inmobiliarias asfixiadas por la deuda, como Metrovacesa o Colonial.
Deloitte, administrador concursal de la empresa, sostiene que Pescanova “es viable” y que tras la recepción, en octubre, de un informe de viabilidad elaborado por PwC podría negociar y alcanzar convenio de acreedores en un plazo de entre tres y cuatro meses.