Francia, también ajuste y más IVA
A la hora de hacer cuentas, parece dar igual el color del partido en el Gobierno. La política que con más intensidad están aplicando los países de la UE se centra en dos pilares: subir impuestos y recortar gasto público. Es en esta línea en la que también el Ejecutivo francés ha diseñado los Presupuestos para 2014. Son unas cuentas públicas fuertemente restrictivas, con el objetivo último de ahorrar 15.000 millones parar rebajar el déficit el próximo año al 3,6% del PIB –prevé cerrar este año en el 4,1%, frente al objetivo del 3,7%– y situarlo a partir de 2015 por debajo del 3% exigido por Bruselas. Como en España, y en el resto de Europa, además de recortar gasto es urgente compensar la caída de ingresos. Y para ello el IVA es también la herramienta más común. Así que Francia subirá el próximo enero el tipo general del 19,6% al 20% (en España es, tras la subida de septiembre, del 21%); el tipo reducido aumentará del 7% al 10%, (quedará como en España) y el superreducido bajará del 5,5% al 5% (un punto por encima de España). La crisis puede haber convertido la política presupuestaria en lo más común de la Unión. Lo preocupante es que el crecimiento previsto también será débil a ambos lados de los Pirineos: 0,9% previsto en Francia y 0,5% en España, aunque en este caso a la espera de una anunciada corrección al alza.