Monde-Lays
Nelson Peltz presentó el miércoles un plan de 60.000 millones de dólares con la finalidad sería unir los aperitivos salados de Pepsi con los dulces de Mondelez Internacional.
A principios de año, Peltz anunció sus participaciones en ambas empresas, lo que dio pie a especular sobre la posibilidad de que intentara empujarlos a una fusión como cuando instó a la adquisición de Cadbury por parte de Kraft. Pepsi rechazó la idea de forma sumisa y perseveró sigilosamente con su campaña Power of One (El poder de uno) mostrando las sinergias de refrescos y patatas fritas.
Aunque las ventajas para la salud de combinar de Doritos y Oreos pueden ser difíciles de defender, la lógica financiera es convincente. Peltz apunta en primer lugar a los reducidos beneficios para los accionistas de Pepsi bajo la dirección de la consejera delegada Indra Nooyi en comparación con los que obtienen rivales como Coca-Cola y Hershey, y su comparativamente baja inversión en publicidad. Comprar Mondelez y luego escindir las bebidas de Pepsi, defiende Peltz, sería la mejor manera de cambiar las cosas.
Si el 8% del objetivo de las ventas pudiera traducirse en ahorros de costes supondría unos 3.000 millones en un solo año. Los analistas de Citigroup valoraron bien en marzo un acuerdo Pepsi-Mondelez, suponiendo que no hubiera sinergias. Peltz también imagina una transacción completa, dando a los accionistas de ambas compañías la posibilidad de beneficiarse de cualquier ventaja.
Otras propuestas menos ambiciosas olvidarían Mondelez, aunque estas serían las opciones más débiles en la mente de Peltz. Sin embargo, todavía crearían por lo menos el doble de valor para los inversores de Pepsi que si siguen inmóviles. Pese a que el análisis puede parecerse a un prospecto de Wall Street, el jefe de la firma Trian Fund Management también trae consigo un historial de éxito en dar vuelcos a la industria alimentaria.
Pepsi ha asegurado que proporcionará un análisis de su negocio de bebidas norteamericano el año que viene. En este punto, tendrá que presentar viandas más contundentes.