Los títulos de Popular pierden el nivel logrado tras la ampliación
El posible impacto de la clásula suelo y las últimas turbulencias pesan sobre el valor
La cotización de Banco Popular lleva tres semanas complicadas. El 4 de junio, sus acciones se intercambiaron a 3,255 euros, el mejor nivel en cuatro meses. Desde entonces han sufrido una caída del 22,62%, convirtiéndose en el peor valor del Ibex en el último mes.
Tras sumar 12 de las últimas 15 sesiones a la baja, los títulos de Popular cerraron ayer en 2,395 euros, con lo que ya han dejado atrás el suelo de estabilización que encontró el valor después de culminar una exitosa ampliación de capital, a finales de 2012. Tras captar 2.500 millones de euros, las acciones de Popular lograron estabilizarse en diciembre de 2012 en torno a 2,75 euros, un nivel que dejaron atrás hace días. Las acciones nuevas, no obstante, se vendieron a 2,005 euros (0,401 euros antes del contrasplit, con derecho a tres nuevas por cada título).
Los analistas consultados mencionan diversos factores que han afectado a la cotización de Banco Popular: la sentencia del Tribunal Supremo que anula las cláusulas suelo abusivas (algo que podría repercutirle más que a otros competidores) o las dudas sobre la recuperación de España (lo que le habría penalizado más que a sus competidores más internacionalizados:_Santander y BBVA). Desde la entidad recuerdan que en 2013 Popular acumula una caída del 17%, en línea con el recorte medio del sector financiero (-19%) y achacan la mala evolución de las últimas sesiones a factores exógenos como “la posible retirada de estímulos monetarios por la Fed, la inacción del BCE y el temor a una brusca ralentización de la economía china”. En 2013 otros han sufrido más: Sabadell pierde un 34,5% y Santander un 20,1%, frente al 18,26% de Popular.
A esta mala racha bursátil, Popular sumó ayer otra noticia negativa: la firma Standard & Poor’s decidió rebajar un escalón (de BB a BB-) la calificación crediticia de la entidad financiera, por el deterioro sufrido por sus activos, que puede llevar a la entidad a necesitar más provisiones. Según aclara S&P, la mora del banco se incrementó un 2,7% en los dos últimos trimestres, frente a un 1,1% de media del sector en España. Los activos “problemáticos que el banco acumula –préstamos morosos, activos inmobiliarios y créditos refinanciados– representaron alrededor del 30% de la cartera crediticia a partir de marzo de 2013”.
La entidad destaca que este año ha logrado más liquidez que en todo 2012, lo que demuestra que “los inversores reconocen al banco como un emisor solvente”. En concreto, ha conseguido 950 millones de euros en deuda sénior y otros 1.295 millones en cédulas hipotecarias.