El ‘cloud computing’ llega a la Universidad
Españarestringe el uso de la nube informática
El cloud computing es un término indescifrable pero que está modificando la vida diaria de millones de personas. Cada día son más los individuos, organismos y empresas que precisan de la necesidad de disponer un espacio virtual para almacenar todo tipo de información a la que puedan tener acceso en cualquier momento y en cualquier parte del mundo. Sin embargo, para Gobiernos como el español aún existe desconfianza para avanzar en la legislación de los sistemas basados en el cloud computing. Es por ello, que en el último año España ha retrocedido dos puestos, hasta la onceava posición, en el ranking de las 24 economías líderes de tecnología de la información (TI) del año 2013, según la asociación BSA que analiza las políticas internacionales sobre este tema.
El cloud computing, terminología utilizada por primera vez hace más de una década, es un sistema que permite ofrecer servicios de computación a través de internet, ya sea en el móvil o en una red fija, y que a su vez es alojado en servidores del ciberespacio. Desde una transacción bancaria online, hasta bases de datos de corporaciones internacionales. A pesar del reciente boom de la nube, los expertos reconocen que en varios estados europeos las políticas sobre la innovación de esta tecnología son restrictivas y por tanto se han topado con una barrera que hace desigual la competencia frente a países como Japón, Australia y Estados Unidos que están a la cabeza en su desarrollo e implantación.
El estudio de BSA detalla que España debe centrarse en la mejora de la privacidad de datos, la seguridad y la protección de la propiedad intelectual, especialmente en materia de responsabilidad de los proveedores de internet, con el fin de mejorar su situación con respecto al resto de países y ayudar al crecimiento de la nube global.
“A la agenda digital española le hace falta una pata fundamental, que es tener una simetría legislativa en el desarrollo del cloud”, expuso ayer el consejero delegado de Arsys, Faustino Jiménez Carracedo, en el primer encuentro sobre los retos de la formación sobre la nube, organizado por la Escuela Universitaria de Diseño e Innovación (ESNE) en Madrid. La directora de tecnología e innovación de IBM España, Elisa Martín Garijo, propuso por su parte una agenda digital más agresiva porque “la competencia está en cualquier sitio del mundo y no somos conscientes de ello”.
La incertidumbre sobre la legislación no solo afecta a las empresas sino que llega a la universidad. El ESNE, la primera escuela universitaria en iniciar un grado en ingeniería del cloud computing y computación ubicua en España, también se ha enfrentado a ese problema. “Estamos encontrando dificultades por el poco entendimiento que se tiene de estas áreas, pero es cuestión de responder a todas esas dudas con buenos argumentos basados en datos reales de las empresas”, declaró Rafael Díaz, director ejecutivo de ESNE, a CincoDías.
La carrera de cloud computing y computación ubicua, de cierta forma, ayudará a hacer más entendibles los nuevos paradigmas de los sistemas de información y aplicaciones, aseguró Díaz. El ESNE será pionero en incorporar a sus planes de estudio un grado que trate específicamente el tema de la nube, ya que en todo el mundo solamente hay carreras de este tipo en Estados Unidos y Catar. En cuatro años saldrá la primera generación.
Dentro del entramado empresarial, IBM es una de las empresas que lucha contra las restricciones y planea convertir a España en uno de los centros mundiales para el desarrollo del cloud. En septiembre, el gigante de la computación inaugurará en Barcelona uno de sus centros, ya que prevén una aceleración del mercado por la incorporación de la telefonía móvil que consigue bajar la barrera de entrada de la tecnología y aumentar la demanda.
Un perfil de estudiante abierto al cambio
La nueva carrera de cloud computing está abierta a todos los públicos. El perfil de estudiante que la Escuela Universitaria de Diseño e Innovación busca para sus futuras generaciones es muy amplio y solo es preciso contar con el título de bachiller. Rafael Díaz, director ejecutivo del ESNE, detalló que en algunos casos se buscan perfiles con estudios de informática, sin embargo “con un bachillerato tecnológico es mejor, pero no es un requisito”. Según declaró el director ejecutivo, “las asignaturas están previstas de comenzar desde cero, desde programación, algoritmia y esos componentes de la carrera básicos y no es necesario un bachillerato especializado”.
¿Cuál es el objetivo de la carrera? Para el director del grado en el ESNE, Daniel Parente, es generar un cambio de pensamiento para que los estudiantes entiendan la tecnología de una forma totalmente diferente. “Es la única forma para explotar las oportunidades que se van a generar en el cloud computing”, afirmó.
Para Parente, “la fortaleza no reside en el programa académico, sino en la oportunidad de moldear intelectualmente a los estudiantes a la medida de las necesidades que nosotros detectamos en la industria, porque nosotros estamos pendientes de las empresas que usan esta tecnología”, aseguró Daniel Parente.
La carrera consta de cuatro años, pero desde el primero los estudiantes estarán en contacto con las empresas desarrolladoras como Microsoft, IBM y Oracle.