Jarro de agua fría de Merkel: no habrá recapitalización retroactiva para la banca española
La canciller alemana, Angela Merkel, ha dejado clara su postura: "no va a haber ninguna recapitalización directa" para la banca española, ya que estará solo disponible en el futuro cuando las entidades españolas ya no tendrán dificultades de las que preocuparse. La canciller rechaza así una de las principales aspiraciones del Gobierno.
"No va a haber ninguna recapitalización directa retroactiva, sino que solo habrá, una vez que sea posible la recapitalización, esa posibilidad en el futuro", explicó Merkel en conferencia de prensa al término de la cumbre europea. "La banca española acaba de ser sometida a una evaluación internacional. Tienen unas necesidades de capital que se han determinado ahora y tiene un programa a través del cual será recapitalizada. Hasta ahí todo está decidido y ahora España solo tiene que pedir los tramos correspondientes", explicó. Con estas palabras, la canciller echa por tierra una de las principales aspiraciones de la delegación española.
"Tampoco habrá una recapitalización directa retroactiva, sino que, una vez esté disponible la recapitalización (directa a través del Mecanismo Europeo de Estabilidad), esta solo será posible en el futuro" para problemas bancarios venideros, insistió.
A juicio de Merkel, "cuando la supervisión bancaria esté instalada, ya no tendremos ningún problema con la banca española". "Esa al menos es mi esperanza", agregó. El programa de la ayuda europea para la banca española finalizará en junio de 2013.
Poco antes, el miembro del consejo del BCE, el austríaco Ewald Nowotny, próximo a Jens Weidmann, el gobernador del Bundesbank, aseguraba sin embargo que podría haber "soluciones provisionales" para aliviar el estado de las entidades españolas, aunque no dio detalles.
La canciller alemana reiteró que el supervisor bancario único no funcionará el 1 de enero de 2013, fecha en la que los líderes europeos esperan haber aprobado ya el marco legal, e incluso ese trabajo a nivel de los ministros de Finanzas podría sufrir retrasos, admitió. "Esa fecha ya es muy ambiciosa", señaló Merkel, que reiteró que debe haber tres pasos en la secuencia adecuada: primero tiene que estar la base legal, después hay que desarrollar la capacidad operativa del supervisor y solo cuando esté funcionando efectivamente se podrá dar paso a la recapitalización directa de la banca".
"Dado que aún no tenemos el primer paso, no les puedo decir a ustedes cuándo se cumplirá el tercero y último", indicó. La canciller alemana recalcó que todavía quedan cuestiones legales complicadas por aclarar.
Después, añadió, habrá que negociar las legislaciones con el Parlamento Europeo y a tres bandas con la Comisión Europea, los países miembros y la Eurocámara.
El Bundestag y otros parlamentos tendrán también que aprobar los textos y por último desarrollar el mecanismo, lo que incluye contratar a entre 200 y 400 personas. "Eso requiere tiempo", dijo Merkel, quien explicó que el gobernador del Banco Central austríaco dijo que se podría comenzar a supervisar a los bancos a principios de 2014.
"Por la secuencia en la práctica está claro que todo eso no se podrá lograr en un mes y medio. También habrá que aclarar la cooperación con la Autoridad Bancaria Europea y la participación de los países de fuera del euro", señaló.
"Cuando hay que contratar de 200 a 400 personas para una institución completamente nueva que hoy, a fecha de 19 de octubre, ni siquiera tiene una base legal a la vista, nadie me puede decir que tengamos todo listo a principios de 2013. Está más claro que el agua", enfatizó.
Merkel también sostuvo que será el propio Banco Central Europeo (BCE) el que determine cuándo el supervisor bancario esté funcionando de forma "efectiva", un requisito previo para la recapitalización directa de la banca, y que esta cuestión se abordará probablemente también en el Consejo de ministros de Economía de la UE (Ecofin).
Merkel rechazó que haya tenido en mente las elecciones que su país celebrará en septiembre de 2013 para descartar la recapitalización directa para la banca española, ante la dificultad que ello supondría explicárselo a su electorado y ante el Bundestag (Parlamento alemán).
Aseguró que "ni siquiera" lo ha pensado, al tiempo que señaló que ese argumento lo ha escuchado por primera vez en la cumbre europea e insistió en que "no es así".