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Belén Frau

La sonrisa de Ikea

Doce meses al frente del gigante sueco le han bastado para ser una de las ejecutivas referencia del país. Así lo dice su último reconocimiento: mujer directiva del año.

Belén Frau
Belén FrauHogue

Una máxima que desde Ikea transmiten a todo aquel que entra a trabajar en la empresa es la de desarrollar allí toda una carrera profesional, algo así como pasar de la tienda al despacho. El mercado laboral español no puede garantizar tal cosa, pero hay algunos ejemplos que pueden probar que esa máxima se ha venido llevando a cabo, al menos en cierta medida. Uno de ellos puede ser el de Belén Frau (Bilbao, 1974), la responsable desde hace algo más de un año de manejar, desde la dirección general para la Península Ibérica, uno de los negocios que mejor resiste el declive del consumo en nuestro país.

No es su caso el de alguien que escala desde lo más bajo de la empresa hasta su cargo de máxima responsabilidad. La épica no se estila demasiado en estos tiempos, pero el ejemplo de Belén Frau es el de alguien que no ha parado de progresar. Licenciada en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad del País Vasco, con apenas 23 años entró a formar parte de la plantilla de Deloitte en Bilbao, llegando al puesto de gerente de auditoría para sectores como el de la energía, los servicios y las telecomunicaciones, y celebró la llegada de la treintena trabajando en la apertura de la tienda de Ikea en Barakaldo en 2005, donde comenzó como jefa del departamento de administración. Solo un año después fue nombrada subdirectora de ese centro, para en 2008 tomar toda la responsabilidad como directora. Un nombramiento que vino con un pan bajo el brazo, ya que llegó cuando Frau contaba los días para dar a luz a su segundo hijo. Desde que abrió sus puertas, el Ikea de Barakaldo ha recibido unos 20 millones de visitantes y es la referencia para los consumidores de todo el País Vasco, Cantabria, La Rioja y Navarra.

Tres años en la dirección del centro fueron suficientes para que desde la dirección central se fijaran en ella para sustituir a Peter Betzel. El alemán estuvo en el cargo desde 2007, e Ikea Ibérica le sirvió de trampolín para pasar a dirigir el mercado más importante para Ikea en Europa: el alemán. Una responsabilidad para Frau que, a sus 37 años, se convertía en la primera española en ocupar el cargo principal de la cadena en España y Portugal. Un paso que le obligó a abandonar su Bilbao querido, donde nació, creció, estudió y desarrolló su carrera hasta entonces, para ocupar el despacho en la sede de la compañía en San Sebastián de los Reyes. Sin embargo, el cambio no le hizo dudar: "No sé cómo me voy a organizar, pero a esto no se puede decir que no", reconocía en una entrevista.

Pese a la lógica nostalgia por dejar una tierra a la que se siente realmente apegada, Frau vio el vaso medio lleno. Esta es una de las cualidades que más se destaca de ella: su capacidad para verlo todo desde una perspectiva optimista, donde el resto quizá solo ve problemas. Nada la desvía de sus objetivos, y tiene en el atrevimiento en la toma de decisiones otra de sus principales características, lo que no le impide tener un gran sentido común. Aficionada del Athletic de Bilbao como buena vizcaína, también le gusta el baloncesto, pero lo que le apasiona por encima de todo es la gente, los compañeros de trabajo, los amigos y la familia, principalmente ésta, a la que se siente estrechamente unida y de la que es la menor de cinco hermanos.

Virginia Medina, jefa de marketing de Ikea Barakaldo, compartió muchos momentos con Belén Frau, y destaca por encima de todo la capacidad por hacer equipo, sentir partícipes de los éxitos profesionales a quienes le rodean día a día y su cualidad para extraer de ellos el máximo trabajo. "Es un ejemplo clarísimo del modelo Ikea", afirma, un modelo que pretende romper las barreras entre jefes y empleados y crear ambientes de trabajo positivos. El sentido del humor, el optimismo contagioso, y ser una persona detallista con su equipo ayudan a que, en el caso de Frau, así sea. Medina también resalta su memoria fotográfica y su aptitud para abarcar todo de una manera tan efectiva, tanto en su vida profesional como personal.

Unas cualidades que no han pasado desapercibidas. En apenas un año y un mes como directora general de Ikea Ibérica, Belén Frau se ha convertido en una de las ejecutivas de referencia en España. En el mes de marzo recibía el Premio Estrella de la Comunidad de Madrid con motivo del Día Internacional de la Mujer, y esta última semana la Federación Española de Mujeres Directivas la reconocía como directiva del año.

Su receta, según ella misma, "poner el doble de ilusión y de pasión, creer en mí misma y en lo que puedo aportar". Solo así, junto a su capacidad de gestión, puede liderarse una empresa con más 7.000 empleados y una facturación superior a 1.500 millones de euros. Sus tareas inmediatas serán mantener el nivel en un entorno económico adverso e ir cumpliendo con el plan de expansión que prevé abrir una o dos tiendas cada año hasta 2020.

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