El Gobierno ha logrado un ahorro de 17,5 millones en los seis meses de aplicación del plan que puso en marcha a principios de año para racionalizar el uso de los inmuebles pertenecientes al patrimonio del Estado. El objetivo era rescindir los contratos de alquiler que fuera posible y renegociar a la baja otros.
Se han resuelto 61 contratos de alquiler, lo que ha supuesto un ahorro de 15 millones. El resto del dinero procede de la renegociación de los contratos.
Así lo ha indicado este viernes la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, en la que ha hecho un balance de este plan entre el 1 de enero y el 2 de julio.
Para Sáenz de Santamaría, todas estas "medidas de austeridad" logran un ahorro para el Estado al que se llega "simplemente gestionando bien los recursos públicos".
La vicepresidenta ha anunciado además otra medida en la que está trabajando el Ejecutivo como medida de ahorro según la cual se creará una central de compras para toda la Administración General y que permitirá que todas las necesidades de los organismos estatales se realicen a través de una misma agencia.