El FROB aplaza las subastas de Catalunya Banc y Banco de Valencia
El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) ha decidido aplazar temporalmente los procesos de venta de Catalunya Banc y Banco de Valencia, hasta que se resuelva la ayuda europea a la banca.
El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) ha decidido aplazar los procesos de venta de Catalunya Banc y Banco de Valencia hasta que se resuelva la ayuda europea a la banca. Así lo ha manifestado Fernando Restoy, subgobernador del Banco de España, en la presentación del resultado de la valoración independiente de las necesidades de la banca española llevado a cabo por las consultoras Oliver Wyman y Roland Berger.
Según señala la nota del FROB, "en tanto se concretan los procesos de valoración [conocidos hoy] y el apoyo financiero al que se refiere el comunicado del Eurogrupo, la Comisión Rectora del FROB ha acordado hoy aplazar temporalmente los procesos competitivos que está desarrollando en relación con la venta de Catalunya Banc y de Banco de Valencia". El FROB, según indica, "continuará comprometido con la viabilidad de las entidades bajo su control e inyectará el capital o prestará los apoyos financieros necesarios para garantizar el normal funcionamiento de dichas entidades y asegurar que estas son capaces de cumplir con sus obligaciones con depositantes y acreedores en general".
"En particular, y por lo que a Banco de Valencia se refiere, la comisión rectora del FROB ha acordado proceder de forma inmediata a la suscripción de la ampliación de capital de dicha entidad por importe de 1.000 millones de euros, ayuda provisional que fue notificada y autorizada en su momento por la Comisión Europea, a la espera del plan de reestructuración definitivo", añade la nota.
La posibilidad de retrasar las subastas ya había sido avanzada por el ministro de Economía, Luis de Guindos, durante su comparecencia en el Congreso de los Diputados a finales de mayo. En aquel momento, tras la aprobación de la segunda reforma financiera, De Guindos aseguró que el Gobierno estaba haciendo "una reflexión" y "valorando todas las opciones", a la espera de conocer la valoración de los balances de estas entidades y el interés que estas despertaban en el mercado.
Pocos días después, el exsubgobernador del Banco de España, Javier Aríztegui, aseguraba que las dos entidades en proceso de subasta tenían pendientes de realizar unos saneamientos inmobiliarios, derivados de las dos reformas financieras, por 4.500 millones de euros cada una.
El proceso de subasta de Catalunya Banc y Banco de Valencia debería haber concluido este mes, según el calendario que manejaba el mercado a finales de abril, cuando se repartió el cuaderno de venta de la primera.