Google demanda a Microsoft y Nokia por unir sus patentes
Las guerras por patentes en el sector de la telefonía móvil no parecen tener fin. HTC, Samsung, Apple... las empresas afectadas por litigios de este tipo es enorme, y ahora se añade otro caso a la lista. Google denunció este viernes a Microsoft y Nokia ante la Comisión Europea y el regulador de la competencia estadounidense, porque, en su opinión, ambos aliados "se están confabulando para aumentar el precio de los dispositivos móviles de los consumidores, creando trolls de patentes que dejan de lado las promesas que ambas compañías han hecho", indicó en un comunicado el portavoz de Google en Bruselas, Al Verney.
La expresión troll de patentes se refiere despectivamente a la estrategia de acumular patentes con el fin de sacar algún provecho económico, sin tener necesariamente la intención de crear productos con ellas, según informa Efe. Google apuntó que sus dos rivales se han aliado para adquirir patentes y transferirlas a la empresa canadiense Mosaid Technologies, especializada en acuerdos de licencia de patentes en el sector de las tecnologías de la información y la comunicación. Y sostuvo que tanto Microsoft como Nokia "deberían rendir cuentas" por las citadas prácticas que, en su opinión, dañan la libre competencia.
La respuesta de Microsoft no se hizo esperar y calificó la denuncia del buscador de "táctica desesperada". "Google se queja de las patentes cuando no va a responder a las crecientes preocupaciones de reguladores, funcionarios electos y jueces acerca de su abuso sobre las patentes esenciales", dijo en clara alusión a Motorola, empresa que recientemente adquirió Google. La compañía capitaneada por Steve Ballmer se lamentó de que Google se queje de la defensa de la competencia en la industria de los smartphones "cuando controla más del 95% de la búsqueda móvil y de la publicidad".
Alquiler de películas
Google lanza en España su servicio de alquiler y compra de películas. Está incluido en su tienda de aplicaciones Google Play y los precios van desde 1,99 euros hasta 4,99 euros, según la antigüedad del largometraje. El pago se hace mediante una cuenta en Google Wallet.