¿Dónde está la presión de los mercados?
La victoria en Francia del socialista Françoise Hollande abre un nuevo escenario de incertidumbre para la eurozona. La presión, sin embargo, vuelve a centrarse en los países periféricos: Grecia alcanza niveles imposibles, con una prima de riesgo superior a los 2.100 puntos, mientras que en el núcleo duro del euro, Italia y España son los países más castigados.
El castigo de los mercados en el núcleo duro del euro se centra en los activos más líquidos, la renta variable. No hay un solo índice bursátil que no pierda hoy más de un 1%, incluido el Dax alemán. Las pérdidas de París, el nuevo foco de incertidumbre a gran escala, están en línea con el resto, con un descenso del 1,4%, frente al 1,55% del Ibex y el 1,6% del Dax de Fráncfort o el 1,2% del Footsie MIB de Milán. Donde las cosas han saltado por los aires es en Grecia, donde el índice Atenas retrocede más de un 9%, mientras que la prima de riesgo de los bonos a 10 años ha alcanzado el imposible nivel de los 2.105 puntos básicos.
Los bonos griegos a 10 años se venden en el mercado con una rentabilidad superior al 22,6% y un descuento que anticipa una probabilidad de impago del 80%. La entrada del partido filonazi Aurora Dorada (ellos matizan que los nazis son alemanes y ellos, griegos) ha reventado el escenario político y ha roto el mercado de deuda. En realidad, prácticamente no se hacen intercambios de bonos en este mercado.
En las plazas de renta fija que sí funcionan, también hay cierta presión, aunque a una escala infinitamente menor. España e Italia son los países más penalizados de largo, con una subida de los spreads de riesgo de 8,9 y 9,6 puntos respectivamente (423,9 puntos y 394,7 puntos). El rendimiento exigido al bono español supera el 5,75% y el de Italia, el 5,49%. La prima de riesgo francesa sube ligeramente (2,7 puntos), manteniéndose el bono en el 2,8%. Alemania vuelve a ser la gran beneficiada: se financia al 1,57%.