El recrudecimiento de la crisis arroja a Italia, Bélgica y Holanda a la recesión
Los peores augurios se están cumpliendo. Tal y como había adelantado la Comisión Europea al presentar sus nuevas previsiones, la zona euro está abocada a otra recesión. Después de Eslovenia, y las dos intervenidas Grecia y Portugal, ayer se confirmó la caída del PIB dos trimestres consecutivos en Italia, Bélgica y Holanda.
La Oficina de Estadística de la Unión Europea, Eurostat, publicó ayer los datos de crecimiento definitivos relativos al último trimestre de 2011. En el conjunto del año, el PIB de la zona euro y de la UE aumentó un 1,4% y un 1,5%, respectivamente, cifras que Bruselas revisó a la baja en una décima en ambos casos. Sin embargo, en el caso del cuarto trimestre los números revelan el recrudecimiento de la crisis global y en tasa trimestral ya se contabilizan los primeros descensos de la actividad. El PIB de la zona euro y de la UE retrocedió de octubre a diciembre un 0,3% por la contracción del consumo de los hogares, el desplome de la inversión y el peor comportamiento del sector exterior.
Entre los países que comparten la moneda única, Italia, Holanda y Bélgica entraron en recesión técnica ya a finales del pasado ejercicio al encadenar dos trimestres consecutivos con retrocesos en la actividad económica, sumándose así a Eslovenia, Portugal y Grecia, mientras que Irlanda, cuyos datos definitivos aún no estaban ayer disponibles, ya registró una contracción en el tercer trimestre. En el caso de Italia, la actividad retrocedió siete décimas en el cuarto trimestre, después de haber disminuido ya un 0,2% en el tercero. En Bélgica la economía cayó un 0,2% de octubre a diciembre, tras un descenso del 0,1% tres meses antes. Mientras, en Holanda la contracción con que finalizó el ejercicio fue de siete décimas, después de haberse contraído un 0,4% en el tercer trimestre. Por su parte, Alemania, con un -0,2%, España, con una reducción del 0,3%, Estonia (-0,8%) y Austria, con una contracción del 0,1%, se asoman a la recesión tras registrar un primer trimestre negativo a la espera de la evolución de sus respectivas economías en los tres primeros meses de este año.
Menor consumo
Sin dejar la zona euro, Finlandia (0,1%), Francia (0,2%) y Eslovaquia (0,9%) registraron datos positivos de crecimiento del PIB, a la espera de conocer las cifras correspondientes a Luxemburgo y Malta, mientras que la actividad de Chipre se estancó en el tramo final de 2011. Dentro de la UE, también la República Checa entró en recesión en la última parte de 2011.
En cuanto a los factores que han motivado este recrudecimiento de la crisis, los indicadores constatan que el consumo final de los hogares disminuyó un 0,4% en la zona euro y un 0,2% en el conjunto de la UE. Ante estas malas expectativas de la demanda, la inversión se desplomó un 0,7%, por lo que acentúa el descenso ya iniciado tres meses antes, del 0,3%.
Los expertos culpan de esta atonía a los duros planes de ajuste puestos en marcha en buena parte de Europa, de ahí que algunos reclamen la puesta en marcha de medidas de estímulo para impulsar el crecimiento y el empleo.
La Comisión ve síntomas de mejora
Pese a los malos datos de crecimiento, la Comisión quiso enviar ayer un mensaje de esperanza. "Aunque la zona euro está actualmente en una moderada recesión, al mismo tiempo hay indicios de estabilización. Estoy convencido de que como consecuencia de nuestros esfuerzos colectivos y si continuamos con la reciente acción decisiva, podemos ser testigos de un cambio de corriente en los próximos meses", destacó el comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn. El comisario aseguró también que el riesgo de una restricción al crédito se ha evitado, gracias en gran parte a la oferta de liquidez a largo plazo del Banco Central Europeo.La puesta en marcha de los planes de consolidación fiscal será determinante para ver si en los próximos meses se recupera la confianza de los inversores o continúan las presiones en los mercados de deuda.