Bruselas alerta sobre las "devastadoras consecuencias" de una quiebra en Grecia
El vicepresidente de la Comisión Europea y responsable del área económica, Olli Rehn, ha advertido sobre "las devastadoras consecuencias de una quiebra desordenada en Grecia para la población local, en especial, para los más vulnerables" y las peligrosas "ramificaciones" que tendría para el resto de países europeos.
Rehn ha lanzado esta señal de alarma en Bruselas durante una comparecencia ante la prensa para celebrar el voto de anoche en el Parlamento griego favorable al plan de ajuste exigido por la UE y el FMI. El comisario europeo ha señalado que esas medidas "debían haberse tomado hace mucho tiempo aunque no hubiera habido un programa [internacional] y recordó que, al menos ahora, van a contar "con un apoyo financiero sin precedentes por parte de los socios de la de Grecia en la zona euro".
El voto de anoche, sin embargo, solo es una de las condiciones requeridas por el Eurogrupo (consejo de ministros de Economá de la zona euro) como paso previo a la liberación de un segundo rescate valorado en 130.000 millones de euros. La Eurozona exige también un compromiso por escrito a los principales partidos políticos griegos (los populares de Nueva Democracia y los socialistas del Pasok) de que el ajuste continuará gane quien gane las próximas elecciones. El líder conservador, Antonis Samaras, probable vencedor en las urnas, se resiste a plasmar su firma en un documento tan impopular.