Terciado denuncia las "desaforadas" exigencias de la banca
El presidente de la patronal de pequeñas y medianas empresas (Cepyme), Jesús Terciado, denuncia las "exageradas y desaforadas" exigencias de la banca para conceder créditos.
Terciado respondió así al presidente del Grupo Santander, Emilio Botín, que ayer aseguró que las restricciones al créditos se deben a la falta de "una demanda solvente". En declaraciones a RNE, el presidente de Cepyme ha señalado que el grifo de la financiación se encuentra "prácticamente cerrado".
En cualquier caso, ha reconocido que hay pymes menos solventes que hace unos años, pero ha negado que todas sean insolventes. Terciado ha explicado que lo que sucede es que para que las entidades financieras den créditos a las empresas se les exige un respaldo de solvencia personal, familiar o inmobiliario.
Terciado ha admitido que hay poca demanda crediticia para proyectos de inversión, pues la mayor parte de las empresas lo que necesitan ahora es circulante. "Y es lo que ahora mismo está prácticamente cerrado. Empresas que hasta el año pasado o el anterior funcionaban con una cuenta de crédito sin ningún problema han visto reducida a la mitad esa cuenta de crédito y se les ha dejado sin oxígeno", ha denunciado.
Sobre las palabras de Botín señalando que los políticos también tienen "una culpa muy grande" de la crisis, Terciado ha coincidido en son en parte responsable de la situación actual, pero ha dejado claro que la banca también tiene su parte de culpa por su exposición "excesiva" al sector inmobiliario.
"La banca debería asumir parte de la culpa que le corresponde. Todos tenemos nuestra parte de culpa, pero la banca desde luego, por el excesivo riesgo al que se sometieron con el ladrillo y el suelo", ha precisado.
Sobre los políticos, Terciado ha recordado que muchos han estado en los órganos de gobierno de las cajas de ahorros, las entidades financieras con más problemas, por lo que entiende que también a ellos y a políticos locales y autonómicos se les puede responsabilizar de parte de la crisis. "En eso le tengo que dar la razón (a Botín)", ha admitido el presidente de Cepyme.