El FMI prevé que España incumplirá el objetivo de déficit y lo duplicará en 2013
El FMI advirtió ayer que España incumplirá la senda de consolidación fiscal este año y el que viene, en el que el déficit será del 6,3% del PIB, más del doble del objetivo del 3% comprometido ante la UE. El organismo avisa de que una excesiva velocidad en los ajustes puede frenar el crecimiento en un contexto de debilidad económica.
El Gobierno español se encargó de sembrar dudas a lo largo de la pasada semana sobre el cumplimiento de la senda de consolidación fiscal pactada con Bruselas. Esta establece que del 8,3% con el que provisionalmente se cerró 2011 se debe pasar a un 4,4% este año y a un 3% en 2013, lo que supone un ajuste superior a los 50.000 millones de euros en apenas dos ejercicios. Ante la dificultad de cumplirlo, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, insinuó que España necesitaría algo más de tiempo para llevar el déficit a esos niveles. Ese mensaje fue rápidamente contestado por la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, y el ministro de Economía, Luis de Guindos, que remarcaron que la reducción del déficit era la primera prioridad del Ejecutivo y que era un objetivo irrenunciable.
Pero las dudas se volvieron a disparar ayer con la publicación de las nuevas perspectivas del FMI, que plantean todavía un escenario más negro que el diseñado por el Banco de España. El organismo supervisor vaticinó el lunes que la economía caería un 1,5% este año y que crecería un tímido 0,3% en 2013. El organismo presidido por Christine Lagarde amplía el retroceso de este año hasta el 1,7% y augura otra caída del 0,3% para 2013. Ese matiz es muy importante ya que el FMI considera que la aceleración de los ajustes está frenando el crecimiento. El economista jefe del Fondo Monetario Internacional (FMI), Olivier Blanchard, aseguró ayer que "la reducción del déficit fiscal es un maratón y no un sprint", en clara alusión a España, que incumplirá la senda de consolidación fiscal.
El informe prevé que el déficit cerrará este año en el 6,8% del PIB, lo que supone 2,4 puntos por encima de lo pactado con Bruselas, y que tan solo se reducirá al 6,3% a finales de 2013, lo que supone más del doble del límite. El FMI, sin embargo, considera que existe margen para que Bruselas eleve la meta establecida para 2012 (un 4,4% del PIB) en la medida que el deterioro económico va a hundir en la recesión a los países de la UE con mayores desequilibrios.
En el caso de España distingue entre dos factores que impulsan el déficit: el incumplimiento de dos puntos porcentuales del objetivo de 2011 y la desaceleración del crecimiento, que ejerce presión sobre el déficit a través de los estabilizadores automáticos. "Creemos que hay margen para poder dar lugar al aumento del déficit procedente de un crecimiento más lento, pero no para aquel que viene del incumplimiento del anterior Gobierno. España tiene que instrumentar medidas para compensar el deterioro de 2011, pero la UE debe tolerar cierto cambio en el objetivo para 2012 como resultado de ese crecimiento más lento", apuntó Carlo Cottarelli, director del Departamento de Asuntos Fiscales del FMI.
Francia y Reino Unido tampoco cumplirán
La economía española no es la única damnificada por la recesión en la zona euro. El informe del FMI no deja títere con cabeza y apunta, además a Francia y a Reino Unido como los otros dos países que tampoco se ajustarán al 3% pactado con Bruselas.En el caso francés, el estudio señala que la diferencia entre gastos e ingresos se elevará al 4,8% del PIB (cuatro décimas por encima del límite) y al 4,4% en 2013 (1,4 puntos superior). Esa diferencia la justifica por el menor crecimiento que experimentará Francia en los dos próximos años. En septiembre, el organismo presidido por Christine Lagarde estimó que el PIB crecería un 1,4% y un 1,9% en 2012 y 2013, respectivamente; tres meses después rebajó estas estimaciones a un 0,2% y a un 1%.Un diagnóstico similar al de España realiza la institución presidida por Christine Lagarde sobre Reino Unido, sometido a un severo plan de ajuste para reconducir su abultado déficit, que se elevó al 8,6% del PIB en 2011. El FMI considera que también incumplirá los objetivos para 2013 y que el déficit tan solo se reducirá hasta el 6,5%, dos décimas incluso por encima de la estimación para España.En el otro lado, Alemania e Italia, dentro de las naciones más grandes de la zona euro, sí conseguirán bajar del 3% y cumplir con el objetivo de consolidación fiscal. De hecho, el déficit italiano será del 2,3%, gracias a que partía de unos niveles muy bajos (un 3,9% del PIB en 2011). Sin embargo, el FMI advierte sobre el crecimiento imparable de la deuda pública italiana, que se colocará este año en el 125,3% del PIB y que escalará hasta el 126,6% en 2013. Ninguna economía de la zona euro cumplirá con el techo del 60% del PIB fijado en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento.Riesgo país estableEl servicio de estudios del BBVA cree que el riesgo de impago de España se mantendrá estable en los próximos años. Es la principal conclusión de un estudio elaborado con una nueva herramienta que mide el riesgo país y su evolución a corto plazo.
Solo el 15% de las empresas cree en la recuperación
Las expectativas de los presidentes y consejeros delegados de las grandes empresas mundiales sobre la recuperación económica se han desvanecido. Así se constata en la encuesta anual que realiza PwC a 1.258 máximos mandatarios y que hoy será presentada en la primera jornada del Foro de Davos.Los presidentes españoles encuestados son más optimistas y uno de cada tres augura que este año será mejor que el anterior.Antes de que se presente este informe, la canciller alemana, Angela Merkel, pronunciará la conferencia inaugural. Su elección no es baladí, ya que de ella depende en gran medida la resolución de la crisis en la zona euro, que comenzó con Grecia, contagió a Italia o España y amenaza con provocar una nueva recesión mundial.Merkel tratará de definir una hoja de ruta para salir de la crisis y así aportar algo de calma a los 500 gobernantes y 1.500 empresarios que se citan en busca de respuestas a la crisis. Frente a ella tendrá a economistas como George Soros o Joseph Stiglitz, que volverán a apuntarla como la principal responsable de que la bomba de relojería que es la crisis de deuda en Europa no se haya desactivado.