_
_
_
_
Por sus críticas a la ley antidescargas de EE UU

Murdoch llama "líder de la piratería" a Google

El magnate de la comunicación también reprocha a la Casa Blanca estar haciendo el juego a los patrones de Silicon Valley, quienes, en su opinión, se están beneficiando de la piratería de contenidos.

Rupert Murdoch
Rupert MurdochReuters

El anuncio por parte de la Casa Blanca de que rechazará la Ley Sopa, la ley Sinde estadounidense que actualmente se está debatiendo en la Cámara de Representantes de EE UU, por considerar que puede servir para censurar actividades legales o inhibir la innovación, ha desatado duras críticas por parte de Rupert Murdoch. El magnate de la comunicación ha atacado desde su cuenta en Twitter a Obama , a quien acusa de estar haciendo el juego a las grandes empresas de Internet, y también a Google, a la que ha acusado directamente de ser el líder de la piratería.

Murdoch, que se ha convertido en un usuario muy activo en Twitter en las últimas semanas, lanzó el sábado una andanada de acusaciones contra el popular buscador. En sus comentarios, aseguró que Google se beneficia de la publicidad vendida en torno a materiales pirateados y calificó al gigante de las búsquedas de auténtico "líder en piratería".

La respuesta de Google no se ha hecho esperar. La compañía envió un correo este domingo a la publicación online Cnet donde se defendía de tales acusaciones. "Esto es un disparate", dijo un portavoz de Google. "El año pasado descartamos de nuestros resultados más de cinco millones de sitios por infringir las reglas contra la piratería y la falsificación e invertimos más de 60 millones de dólares en la lucha contra los malos anuncios. Google lucha contra la piratería y los falsificadores todos los días", añadió la compañía en la nota.

La ley Sopa ha desatado un fuerte enfrentamiento entre sus partidarios (los grandes grupos de medios, los estudios de Hollywood y las compañías discográficas) y sus opositores, los gigantes de la red, como Google, Facebook y Twitter, que han amenazado con un apagón digital para este miércoles como forma de protesta contra esta norma.

Desde 1998, la ley que persigue la piratería en EE UU es la denominada Digital Millenium Copyrigh Act, que obliga a retirar el material considerado ilegal a las páginas web que hacen uso del mismo, pero no tiene competencia sobre lo que se publica desde otros países. De ahí que el autor de la Ley Sopa, el republicano Lamar Smith, hiciera hincapié la semana pasada de que el proyecto de ley sólo afectaría a sitios de Internet basados en el exterior. Smith acusó, además, a quienes se oponen a la ley de estar disfrazando sus intereses económicos con la retórica sobre la libertad de Internet.

Google, que se une a una lista creciente de opositores a la ley Sopa porque sostienen que esta pondría en peligro la libertad de expresión y la innovación y no protegería de la piratería, aseguró el domingo que hay mejores métodos para luchar contra este problema que los que proponen los propietarios de los derechos de autor. "Creemos, al igual que otras muchas grandes empresas tecnológicas, que la mejora manera de detener la piratería es a través de una legislación específica que requeriría de redes de anuncios y procesos de pago, como los nuestros, para cortar los sitios dedicados a la piratería y la falsificación", indicó la compañía a Cnet.

Mientras en EE UU los ataques por la ley Sopa entre un bando y otro sube de tono, en España las críticas a la ley Sinde continúan. Enrique Dans, profesor del Instituto de Empresa, critica en su blog que frente a EE UU, donde la ley Sopa va a ser redefinida con la participación de todos los implicados después de que la Casa Blanca haya pedido reiniciar los trabajos legislativos, en España la Ley Sinde, "que hace exactamente lo mismo que proponía Sopa (Cerrar páginas sin tutela judicial efectiva y bloquear las DNS de aquellas que se encuentren fuera del país) y que fue aprobada precisamente debido a la presión de los EE UU, está aprobada y a punto de entrar en vigor el próximo marzo. Es la diferencia entre una democracia decente y esta España en la que vivimos", concluye.

Archivado En

_
_