La industria turística, dividida por la supresión de los puentes
La propuesta de CEOE de acabar con las festividades de más de tres días ha sembrado la división entre la industria turística. La patronal calcula que por cada día de puente se pueden llegar a perder hasta 4.830 millones de euros. Una de las fechas que se vería directamente afectada por esa decisión sería el "acueducto" de diciembre, que este año se ha elevado a casi una semana de vacaciones, en la que se producen un gran número de desplazamientos (el nivel de ocupación en 2010 se elevó al 66%, pese a la huelga de controladores). La posición de los hoteleros, sin embargo, está muy dividida entre aquellos que dependen del turismo nacional y del extranjero. En el primer caso se sitúan los destinos del norte de España o los vinculados al esquí que reciben un gran flujo de viajeros nacionales durante estas fechas. La posibilidad de que se acorten las vacaciones ha provocado las quejas de estos empresarios, que prevén fuertes pérdidas para los próximos ejercicios si finalmente la CEOE opta por recortar los "acueductos". En el otro lado se encuentran aquellas comunidades que dependen en gran medida del turismo extranjero, como Canarias, cuyos empresarios se han posicionado a favor de una racionalización de los festivos.
En cualquier caso, la llegada de turistas, tanto nacionales como extranjeros, se ha visto directamente afectada este año por la crisis y el paro. Las primeras previsiones apuntan a que los niveles de ocupación serán inferiores a los alcanzados en el mismo período del año pasado.