La supresión de los puentes mejorará la producción industrial en 2.000 millones
La mejora de la productividad es la razón fundamental que llevará a Mariano Rajoy a trasladar los puentes al inicio o final de semana. En 2012 se ganarán cuatro días más y la industria generará 2.000 millones de euros, es decir, el PIB aumentará dos décimas para el próximo año.
La propuesta fue presentada hace dos meses por la CEOE y Cepyme de cara a las elecciones generales. El objetivo era ofrecer a los partidos una receta para salir de la crisis y ahora la iniciativa ha sido recogida por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. Durante el debate de investidura, el líder de los populares dio a conocer algunas de las medidas que tomará en los próximos meses para combatir el desempleo y la crisis, sus dos mayores prioridades a día de hoy, y el traslado de los festivos al lunes es una de ellas.
"Abordaremos los costes que para nuestra economía suponen los puentes, de manera que se trasladarán las fiestas al lunes más cercano, con la excepción de aquellas fiestas de mayor arraigo social", señaló Rajoy en su intervención ante el Congreso.
La iniciativa es considerada por la patronal como una medida que ayudaría a mejorar la productividad y la competitividad de las empresas. De hecho, el presidente de Cepyme, Jesús Terciado, cree que puede ser una buena manera de renovar e innovar para el sector empresarial. Además, la decisión, que lleva varios años estudiándose en el seno de la patronal, permitirá poner fin a los problemas que supone el arranque y parada de la producción como consecuencia de los festivos entre semana.
Sin embargo, los sindicatos no se muestran tan convencidos con la propuesta y la califican de barbaridad para la industria turística española y los comercios. El secretario general de CC OO, Ignacio Fernández Toxo, señaló que España es el único país de la UE que dispone de una jornada laboral anualizada y que "con los puentes no se pierden jornadas ni horas de trabajo; incluso pueden implicar una ventaja comparativa que debería desarrollarse aún más".
Terciado, por su parte, discrepa sobre la razón esgrimida por los sindicatos del efecto en el turismo y cree que se verá compensado con los fines de semana de tres días.
En medio de este cruce de opiniones, Mariano Rajoy ha decidido decantar la balanza hacia el lado de los empresarios. En el discurso de investidura, el actual presidente, que considera al sector empresarial como el motor principal para crear empleo, acabó apelando a la mejora de la productividad como argumento de peso para su puesta en marcha.
Aunque hasta el momento no existe ningún estudio fehaciente que demuestre que esto será así, sí que hay la creencia de que en los años bisiestos el PIB aumenta, aunque sea levemente. Pero con los datos sobre la mesa y analizando los primeros trimestres de este tipo de años se puede llegar a la conclusión de que un día más apenas tiene alcance en el PIB. En los últimos cuatro años bisiestos solo en 2008 el PIB fue superior al del resto durante los tres primeros meses. En concreto, en ese periodo alcanzó los 265.723 millones de euros.
No obstante, aunque la repercusión de un día más en el calendario laboral sea mínima, con la nueva propuesta anunciada por Mariano Rajoy en 2012 se contará con cuatro días más a nivel nacional, tres de ellos corresponderán a festivos y uno, el 29 de febrero, al año bisiesto. En este caso sería lógico pensar que para el próximo año aumente la producción.
Siguiendo la medida que se pretende implantar solo tres de los festivos de 2012 se verán sometidos a un cambio de día. Los afectados serán el 15 de agosto, el 1 de noviembre y el 6 de diciembre que caen en miércoles y jueves, respectivamente. Aunque se ganen tres días, el puente del octavo mes del año apenas influirá ya que en esa época la producción industrial se encuentra baja mínimos al coincidir con el periodo de vacaciones.
Para el conjuto de 2010 la industria contribuyó con 155.191 millones de euros al PIB nacional, lejos de los 666.171 millones que reportó el sector servicios. Aplicando la propuesta de la CEOE y Cepyme en el año próximo la industria mejorará en 1.860 millones de euros más, lo que equivale a un incremento del PIB en dos décimas.
Excepciones
Como excepción a la nueva normativa, aún no aprobada, se hallarán el día de Navidad (25 de diciembre), el de Año Nuevo (1 de enero), el del trabajador (1 de mayo) y el de la Hispanidad (12 de octubre). Debido a su arraigo social y especial significación estos festivos permanecen intactos.
A los festivos nacionales hay que añadir los propios de cada comunidad autónoma y es precisamente en este último apartado donde más efecto tendrá la propuesta de la CEOE. Por ejemplo, en el caso de Madrid, el día de la Comunidad viene seguido del día del Trabajo y suele ser una oportunidad que aprovechan muchos empleados para tomarse un par de días libres y escapar de la rutina.