Todo listo en Italia y en Europa para el aterrizaje de Mario Monti
Hay prisa por nombrar nuevo Gobierno en Italia antes de que los mercados abran sus puertas. Cuando miles de italianos celebran todavía en las calles la salida de Berlusconi, Napolitano ya ha encargado al ex comisario europeo Mario Monti la formación del nuevo Ejecutivo. Bossi ha dicho no, pero el PDL, el Partido Democrático y el Tercer Polo se apuntan. Todo está listo ya para Monti.
El jefe de Estado italiano, Giorgio Napolitano, ha dado el mandato a Mario Monti para que encabece un nuevo Gobierno de emergencia encabezado por Mario Monti, que sucederá al saliente primer ministro Silvio Berlusconi y que tiene el encargo de gestionar una crisis que ha llevado a la tercera economía de la zona euro al borde del desastre financiero.
Apenas unas pocas horas después de que Roma viviera celebraciones espontáneas en las calles por la salida del Berlusconi, el presidente Giorgio Napolitano se reunió con los líderes de ambas cámaras del Parlamento.
Las consultas continuaron hasta cerca de la media tarde, con todos los partidos desfilando por el despacho de Napolitano para darle su opinión. El líder de la federalista Liga Norte y exsocio de Silvio Berlusconi, Umberto Bossi, por ejemplo, dijo que no está de acuerdo con un Gobierno técnico en Italia y que, de ser así, la formación pasará a la oposición. Mientras, el llamado Tercer Polo, formado por los partidos Alianza para Italia (API), Unión de Demócratas y Cristianos (UDC) y Futuro y Libertad (FLI), ha apoyado la opción de Monti.
El siguiente paso fue convocar a Monti y confirmarle su nombramiento. El objetivo es que Italia resolviera todos sus problemas políticos antes de que abra mañana el mercado.
La caída de Berlusconi
Las últimas horas de su mandato no han sido fáciles para Berlusconi, que tuvo que encarar un coro de abucheos e insultos cuando era conducido hacia el Palacio Quirinale para presentar su renuncia a Napolitano.
La multitud fue creciendo paulatinamente después de que el Parlamento aprobara una nueva ley de presupuesto el sábado por la tarde, despejando el camino para que Berlusconi cumpliera con su promesa de dejar el Gobierno tras no conseguir una mayoría legislativa en una crucial votación el martes.
Tras semanas de incertidumbre política y crecientes llamamientos de sus socios internacionales para que controlase su enorme carga de deuda, los costes de crédito de Italia llegaron a niveles casi inmanejables esta semana, amenazando a Europa con un nuevo colapso financiero.
Monti, nombrado senador vitalicio esta semana, se reunió el sábado con el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, y con políticos de varios partidos italianos al comienzo de los preparativos para la transición incluso antes de la renuncia formal de Berlusconi.
Con las próximas elecciones previstas para 2013, el nuevo Gobierno de tecnócratas podría tener un plazo de hasta 18 meses para aprobar las severas reformas en el Parlamento, pero de todas formas tendrá que conseguir una mayoría legislativa y podría caer antes de finalizar su mandato.