El Gobierno obliga a los bancos a contribuir en el rescate de las cajas
Golpe de efecto del Gobierno. Con el Parlamento disuelto y a poco más de un mes de las elecciones generales, el Ejecutivo ha decidido fusionar los tres fondos de garantía de depósitos (bancos, cajas y cooperativas de crédito) y que el fondo resultante absorba las pérdidas que resulten del rescate del sector de cajas. Esta medida permitirá que se cumpla el objetivo pactado con la UE de que el déficit público cierre 2011 en el 6%.
Ya lo advirtió el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en la última sesión de control de la legislatura: "este Gobierno no está en funciones". Buena prueba de ello es la decisión anunciada ayer. El Ejecutivo va a aprobar, por decreto ley, la fusión de los fondos de garantía de depósitos (FGD) con el objetivo de que la suma de los tres cubra las futuras pérdidas del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), el organismo utilizado para financiar con dinero público el rescate de las cajas de ahorros.
La medida, que deberá ser ratificada por la diputación permanente del Congreso, se produce en pleno debate europeo sobre la necesidad de recapitalizar el sector bancario. En España, el trabajo ya se ha hecho, pero ahora llega el debate sobre sus costes. Con la nueva norma, los bancos y las cooperativas de crédito costearán la reestructuración de las cajas, algo por lo que ya se ha quejado la Asociación Española de Banca (AEB). A cambio, permitirá que el Gobierno no se desvíe del objetivo de déficit público pactado con Bruselas.
El anuncio se produce además, en mitad del escándalo generado por los millonarios sueldos pactados por los directivos de algunas cajas que han tenido que ser rescatadas o intervenidas.
Salgado explicó que la normativa "permitirá que las pérdidas netas potenciales del FROB sean imputadas al nuevo FGD, de modo que la recapitalización del sector financiero español no produzca efectos sobre el déficit público ni suponga costes para el contribuyente".
Actualmente, el patrimonio conjunto de los tres fondos (bancos, cajas y cooperativas de crédito) asciende a 6.593 millones de euros.
En el horizonte de las futuras pérdidas que podría absorber el FGD único, destacan especialmente las minusvalías que pueda generar Caja Mediterráneo (CAM), intervenida por el Banco de España el 22 de julio. El FROB inyectó 2.800 millones de euros para recapitalizar la entidad. En la subasta de CAM y con el objetivo de hacerla más atractiva, el FROB ofrecerá un Esquema de Protección de Activos (EPA) que absorba el 80% de las pérdidas futuras durante los 10 años. Cualquier precio inferior a 2.800 millones que se pague por la caja (algo más que previsible), ya supondrá una primera pérdida neta para el FROB (e indirectamente para el nuevo FGD), que se sumará al goteo de números rojos en los próximos ejercicios. En caso de que la subasta quede desierta y CAM sea liquidada, las pérdidas serían mayores.
A este inminente agujero negro, se añaden los que podría provocar el desembolso de 5.130 millones de euros para tomar el control de Novacaixagalicia, Catalunya Caixa y Unnim. El objetivo del Fondo es conseguir que inversores privados recompren la participación que ahora tiene en las tres entidades (del 93%, del 90% y el 100%, respectivamente). Si lo hacen durante el primer año, tendrían un recargo del 12% por los intereses devengados. Sin embargo, al igual que ocurre con el caso de CAM, el FROB se anotaría minusvalías si ingresa menos de lo que pagó por entrar en el accionariado de estas tres cajas.
Por último, el fondo ha prestado a seis grupos de cajas (entre las que se encuentran las cotizadas Bankia y Banca Cívica) 9.294 millones de euros en forma de participaciones preferentes, a un tipo de interés del 7,75% anual. Hasta ahora, todas han pagado religiosamente, pero si alguna entidad no pudiera hacerlo, supondría otro quebranto para el FROB.
Salgado justificó la decisión argumentando que "el 98% de los activos financieros de las cajas son ahora gestionados a través de bancos" y recordó que el FGD de los bancos "no es de su propiedad".
También apuntó que el rescate de las cajas es un objetivo "sistémico". De acuerdo con fuentes del sector, la vicepresidenta se ha reunido esta semana con altos directivos de los bancos para lograr que apoyen la medida. Estos reconocieron a Salgado la importancia de cumplir con el objetivo de déficit, al tiempo que mostraron su preocupación porque la medida derive en un aumento de las aportaciones al FGD.
Preguntada por la actuación del gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, en la reestructuración de las cajas, aseguró que "por supuesto que lo ha hecho bien".
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¿Cuál ha sido hasta ahora la principal labor del Fondo de Garantía de Depósitos?
Su labor más conocida es la de indemnizar a los ahorradores de una entidad financiera en bancarrota, para lo que garantiza una cuantía máxima de 100.000 euros por cliente y entidad, que se elevó en el otoño de 2008, al inicio de la crisis, desde los 20.000 euros. Pero el FGD también tiene competencias reconocidas para poner en marcha planes de saneamiento y resolver situaciones de crisis, puesto que el Banco de España no se ocupa del día a día de la gestión de una entidad financiera. Así, antes de la creación del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), era el FGD quien asumía esas competencias, como lo hizo en su día con Banesto y más recientemente, con CCM.
¿Cuál es la capacidad financiera actual del FGD?
La suma de los tres fondos de garantía actuales banca, cajas y cooperativas de crédito asciende actualmente a 6.593 millones de euros. Al cierre de 2010, última fecha con cantidades desglosadas, el FGD de los bancos tenía 3.144 millones, el de las cooperativas contaba con 731 millones y el de las cajas con 1.918 millones. Este último aportó 1.300 millones de euros para el rescate de CCM, antes de que se hubiera constituido el FROB. El conjunto del sistema financiero debe aportar al fondo de forma obligatoria el 2 por mil sobre una base de cálculo en función de los depósitos captados, sin embargo el Ministerio de Economía y Hacienda está autorizado a suspender las aportaciones cuando el patrimonio alcance el 1% de la base de cálculo de las aportaciones de las entidades adheridas en conjunto. Así, Salgado sugirió ayer que hay margen para elevar esas aportaciones anuales hasta el 2 por mil, sin necesidad por tanto de modificar el marco actual. De hecho, las aportaciones ahora en vigor son mayores en el caso de las cajas (1 por mil) que en el de los bancos (0,6 por mil), lo que hace temer en la banca una contribución superior.
¿Hay riesgo de que si el FGD se emplea en cubrir la pérdida que pueda sufrir el FROB no sirva de garante de los depósitos?
No es probable. De hecho, los recursos del fondo no han llegado nunca a emplearse en el caso extremo de tener que garantizar los depósitos de clientes de una entidad quebrada. Se han destinado antes a prevenir esa situación, a través de inyecciones de liquidez y capital.
¿Qué músculo financiero tiene hoy por hoy el FGD?
A diferencia de los fondos de garantía de otros países europeos, el FGD español se dota ex ante, es decir, en prevención de situaciones de crisis, lo que da más efectividad. Y su patrimonio equivale al 40% del volumen del que disponen los fondos de garantía con la fórmula ex ante del conjunto de la UE.
¿Qué motivos llevan ahora al Gobierno a establecer un nuevo destino a los recursos del FGD?
Las inyecciones de capital de FROB a las cajas y en especial los 2.800 millones aportados a CAM pueden ocasionar pérdidas a este fondo, que el Estado debería computar como déficit. Esto complicaría los objetivos de ajuste fiscal a los que España se ha comprometido. Además, la fuerte inyección de capital público y la persistente sequía de crédito ha encendido el debate sobre quién debe financiar el rescate bancario, si el Estado en su totalidad o el propio sector en parte.
Las cifras
7.930 millones de euros ha aportado el FROB para nacionalizar Novacaixagalicia, Catalunya Caixa y Unnim e intervenir CAM.6.593 millones es el capital actual de los fondos de garantía de depósitos.