La caída del turismo nacional lastra la ocupación en el norte de España
Algunos destinos turísticos del norte de España han cerrado junio con unos niveles de ocupación por debajo del 50%, según los primeros datos que manejan las patronales hoteleras. Ese recorte se ha producido por el desplome en la llegada de turistas nacionales, de los que dependen en su gran mayoría.
La recuperación del turismo en la primera parte del año no está beneficiando del mismo modo a todos los destinos en España. Por un lado, las seis grandes comunidades autónomas turísticas (Canarias, Cataluña, Baleares, Madrid, Andalucía y Comunidad Valenciana) han visto cómo la llegada de visitantes se ha disparado en los cinco primeros meses del año por la recuperación de los grandes mercados emisores de viajeros extranjeros (Alemania, Francia, Italia, Reino Unido y Países Nórdicos) y el trasvase de turistas que han cancelado sus viajes a Túnez y Egipto.
De este segundo efecto se ha visto especialmente beneficiada Canarias, que ha recibido a la gran mayoría de extranjeros que cancelaron sus vacaciones en Túnez y Egipto, registrando un incremento anual del 21% hasta mayo (800.000 llegadas más). Pero, junto a ese escenario optimista, convive otro bastante más negativo. La ocupación hotelera en los destinos del norte de España (Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco) ha caído con fuerza en el mes de junio, según los primeros datos que manejan las patronales hoteleras. De hecho, en la gran mayoría de los destinos no se han cubierto ni el 50% de las camas y las reservas para los otros dos meses de temporada alta (julio y agosto) van a un ritmo mucho más lento que en 2010.
Ese fuerte deterioro se ha producido, según fuentes de la patronal hotelera, por la fuerte dependencia que estos destinos tienen respecto al turista nacional. Un dato que avala esta afirmación es que de los 19 millones de extranjeros que visitaron España en los cinco primeros meses del año, el 92% optó por algún destino de las seis grandes comunidades autónomas, mientras que apenas un 8% se repartió entre las restantes once comunidades.
De este modo, el grueso de turistas que acuden a los enclaves del norte de España, mayoritariamente urbanos, son nacionales. Frente al dinamismo mostrado por los extranjeros en lo que va a de año, el visitante nacional ha restringido sus desplazamientos al estar todavía muy condicionado por la crisis y el desempleo. El estancamiento económico ha provocado que la tasa de ahorro de los hogares cayera hasta marzo a mínimos en tres años, lo que muestra que las familias están empezando a tirar de ahorro para cubrir sus gastos.
El turista nacional no solo está viajando menos, sino que también está gastando menos, lo que está obligando a los hoteles a elevar las ofertas para atraer clientes. Así se puede comprobar en el último barómetro de rentabilidad elaborado por Exceltur, en el que se muestra que algunas de las mayores caídas en los ingresos por habitación disponible se han producido en el norte de España. Entre enero y abril, el descenso en tasa anual ha sido del 24,7% en Santiago de Compostela, el 14,7% en Lugo o el 14,6% en Oviedo.
Los empresarios también advierten que la caída en la entrada de turistas nacionales y la menor rentabilidad está afectando directamente a la creación de empleo en esos destinos. Así se puede comprobar también en el informe de Exceltur, en el que seis localidades (Bilbao, Santander, Oviedo, Pontevedra, Lugo y Santiago de Compostela) han sufrido un fuerte recorte del empleo en los cuatro primeros meses. La mayor corrección se ha producido en Santiago de Compostela, con una caída del 11,2% (muy condicionada por la masiva afluencia de turistas en 2010 con motivo del año Xacobeo), seguida por Lugo, con un recorte del 5,9% y Pontevedra, con un 5,5% menos.
Canarias y Valencia abandonan Turismo Sénior
Canarias y la Comunidad Valenciana han decidido no participar en la próxima edición del Plan Turismo Sénior, el proyecto creado por el Ejecutivo para atraer turistas de la Unión Europea mayores de 55 años durante los meses de temporada baja. Cada visitante recibe una subvención de 100 o 150 euros, en función del país de donde proceda. El coste de esa ayuda es financiado a medias por el Ejecutivo Central y la comunidad autónoma.La decisión de las dos comunidades autónomas de salirse del programa, que prevé ocupar 94.000 plazas entre octubre de 2011 y mayo de 2012, obedece a distintos motivos. En el caso de Canarias ha pesado tanto la menor rentabilidad que obtiene por turista como el hecho de que la participación en ese programa choca con el trabajo del Ejecutivo regional para ganar cuota de mercado en países emergentes. "Hemos venido trabajando desde hace años en países del centro y el este de Europa y este programa provocaría un trasvase de clientes del programa convencional a otro más barato", apunta Fernando Cabrera, presidente de la Asociación Hotelera de Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro (Ashotel).En el caso de la Comunidad Valenciana, la participación en el programa está supeditada a la aprobación del programa de saneamiento de las finanzas públicas, que se verá en el próximo Consejo de Política Fiscal y Financiera a finales de julio. El Ministerio de Economía y Hacienda prohíbe a las comunidades autónomas que tienen desequilibrios en sus cuentas públicas firmar acuerdos que supongan un incremento del gasto y que puedan elevar aún más el desfase entre ingresos y gastos.