Málaga y Barcelona ensayan los másteres de abogacía

Las escuelas de práctica jurídica perfilan la futura formación de los abogados

Poco tiempo tienen las escuelas de práctica jurídica y universidades para preparar los futuros másteres de la abogacía que deberán cursar los letrados que quieran ejercer. La entrada en vigor el próximo mes de octubre de la nueva ley de acceso a las profesiones de abogados y procurador, así como del reglamento, obligará a los graduados en Derecho que terminen en julio o septiembre de 2012 a cursar estos posgrados.

Por lo tanto, un año y cinco meses para preparar los convenios con las universidades, diseñar el contenido de los másteres, realizar los trámites administrativos para su formalización oficial (desde pasar por los Ministerios de Justicia y Educación hasta las comunidades autónomas) y captar a los alumnos. En opinión de Luis Martínez, diputado del Colegio de Abogados de Málaga y responsable del máster de la Abogacía con la Universidad de Málaga, "el tiempo es suficiente, pero siempre y cuando las escuelas y universidades sean ágiles en firmar los convenios". Cree que para tener éxito hace falta "voluntad y flexibilidad".

El título oficial

Los nuevos posgrados deberán dedicar al menos 30 créditos a prácticas

En el caso del Colegio de Málaga el convenio se firmó con la Universidad de Málaga (UMA) hace tres años y su contenido se diseñó teniendo en cuenta lo que podría derivarse del nuevo reglamento. El máster de la Escuela de Práctica Jurídica de Málaga cuenta con 120 créditos de clases e incorpora algo más de 30 créditos de práctica, superando los 90 créditos obligados por la nueva normativa (60 correspondientes a las clases teóricas y 30 a las prácticas).

Al ser título oficial, reconocido por la Aneca, el coste del máster es público, 1.670 euros. El claustro del profesorado se compone de 150 profesores y más del 50% de los docentes son abogados en activo.

Otro de los másteres que ha intentado seguir el contenido de acceso a la abogacía y convertirse en pionero de la formación de los futuros letrados ha sido el firmado entre cinco colegios de abogados catalanes (Barcelona, Tarrasa, Sabadell, Manresa, Granollers y Mataró) junto con la Universidad Autónoma de Barcelona, aunque con un precio mucho más alto de 6.000 euros, al ser título propio. El convenio entre estos organismos "ha sido muy fácil", describe Marta Isern, responsable de formación del Colegio de Barcelona, y se ajusta perfectamente al posgrado exigido en el reglamento con 90 créditos. La fecha de inscripción está abierta hasta el 21 de octubre y el comienzo del curso es el 2 de noviembre.

En ambos casos, el único requisito para ser admitido es haber estudiado la licenciatura o grado de Derecho. No hay númerus clausus de corte, pero sí cuentan con una capacidad limitada de plazas. El máster adscrito al Colegio de Abogados de Málaga dispone de 200 plazas como máximo, mientras que el de Barcelona tan solo cuenta con 30 puestos.

A partir de que el Consejo de Ministros apruebe el reglamento, todas las universidades podrán llegar a acuerdos con los colegios de abogados, con la excepción de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED).

El nuevo reglamento contempla que la UNED será la única institución académica capaz de alcanzar acuerdos con el Consejo General de la Abogacía Española y el Consejo General de Procuradores, una novedad del último texto de reglamento, que se dictamina en función de su ámbito nacional, más que por tener una diferente metodología -los grados y másteres a distancia-.

Litigación civil, penal, laboral y administrativa

La formación que los estudiantes reciben en los nuevos másteres resulta eminentemente práctica, con objeto de ampliar los conocimientos del grado o la licenciatura de Derecho. El máster de la Abogacía impartido en Barcelona cuenta con seis módulos, que se desarrollan a lo largo de 13 meses. Entre los contenidos a impartir destacan la litigación civil, penal, laboral, administrativa, el módulo de asesoría y también el módulo profesional. Esta última parte incluye deontología profesional, turno de oficio y management de un despacho: organización del mismo, minutas de honorarios y tributación del abogado."Se trata de un ensayo al nuevo posgrado que amoldaremos en función del contenido del examen", explica Marta Isern.El máster impartido en Málaga, por su parte, además de ampliar los conocimientos del abogado en diferentes campos, ofrece prácticas en juzgados, despachos, organismos oficiales y también visitas al Tribunal Supremo, al Consejo General del Poder Judicial y a la Escuela Judicial Oficial de Barcelona. Allí los alumnos emulan a juicios reales con los futuros jueces y magistrados que se preparan para ejercer.Los profesores provienen también del mundo jurídico y universitario. En Málaga, lo cubren desde abogados, notarios, registradores o secretarios judiciales hasta inspectores de Hacienda. En el caso del máster que se desarrolla en Barcelona, destacan los catedráticos y abogados. En este, una vez cursado, los alumnos deben hacer un trabajo final, cuyo profesor será diferente en función del trabajo elegido por el estudiante. La mayoría de las prácticas en este caso se desarrollan en despachos de abogados.

Las cifras

200 plazas son las que oferta el máster de la Abogacía de la Escuela de Práctica Jurídica de Málaga. El coste de este posgrado asciende a 1.670 euros.30 son las plazas convocadas por el máster de la Abogacía de Barcelona en colaboración con la UAB, cuyo coste asciende a 6.000 euros.