La UE cree que un eventual rescate de Portugal no contagiaría a España
El hipotético rescate financiero de Portugal por parte de la UE y el FMI no contagiaría a España, dijo hoy un destacado responsable comunitario, confiado en la solidez de la zona euro tras las decisiones de la cumbre de la Unión Europea de la semana pasada.
"El riesgo de contagio es mucho menor que hace seis meses", dijo la fuente, que pidió no ser identificada, en unas declaraciones a un grupo de periodistas, en las que recordó que los problemas causados por la crisis política de Portugal han aumentado el diferencial de deuda de ese país frente a Alemania, pero no en España.
"Hay una gran diferencia entre esos dos países.... España trabajó muy duro y de forma creíble", especialmente en la reestructuración de las cajas de ahorro, detalló.
La fuente repasó las decisiones tomadas por la UE en el último año para reforzar la solidez del euro y la gobernanza económica de la zona de la moneda única, y sentenció que para 2013 será "altamente improbable" que un país del euro tenga problemas que puedan generar un rescate.
Sobre Portugal confió en que si un Gobierno puede hacerse con el control de la situación a corto plazo, no hará falta un rescate, ya que no debería tener problemas de financiación en los mercados hasta junio o julio próximos.
También señaló que ha habido un cambio de mentalidad en todos los países, tanto en los que han sufrido problemas como los que no los han padecido, ya que en todos ha habido "un cambio de mentalidad" a favor de reformas económicas para lograr una estabilidad que permita mantener el modelo social europeo.
Las instituciones de la UE deben mantener la presión sobre los países, porque "si no lo hacemos nosotros, los mercados financieros lo harán, y de una forma desproporcionada", advirtió.
La fuente reconoció que los primeros diez años del euro fueron "una pena" en el sentido de que no había una estructura seria de vigilancia macroeconómica, ya que el Pacto de Estabilidad "no tenía credibilidad" después de que Alemania y Francia obligaron al resto de la UE a cambiar las reglas en 2003 cuando sus déficit se dispararon por encima del límite establecido del 3 % del PIB.
Por ello, los países y las instituciones de la UE tuvieron que inventar "sobre la marcha" en el último año toda una serie de medidas, después de que "no se había hecho nada en diez años".
El Consejo Europeo de los pasados jueves y viernes aprobó la creación de un fondo permanente de rescate para salvar a países de la zona euro de la bancarrota, que entrará en vigor en 2013, así como nuevas normas para promover el rigor de las cuentas públicas, que irán acompañadas de nuevos sistemas de vigilancia de los desequilibrios macroeconómicos.
La cumbre aprobó también el "Pacto por el Euro", que establece una serie de áreas en las que los países de la moneda única presentarán compromisos concretos de actuación que deberán cumplir en los próximos doce meses.
La participación en este pacto de los países de fuera del euro será voluntaria, pero en la pasada cumbre seis de los diez países comunitarios que no tienen el euro se adhirieron a la idea.
Estas medidas, sumadas a las que la UE ha tomado en el último año (como la creación de un fondo temporal de rescate), permiten hacer pensar que Bruselas ya ha adoptado "el grueso" de las decisiones para evitar nuevas crisis. "Ahora hay que ponerlas en marcha", subrayó.