Japón eleva de 4 a 5 el nivel de la catástrofe nuclear de Fukushima
Japón ha elevado el nivel de catástrofe nuclear de 4 a 5. Esta calificación ha sido polémica, porque contrariamente a lo que decía Japón, Francia le atribuyó desde el principio nivel 6. El nivel 5, según lo que marca la escala internacional, equivale a 'accidente con consecuencias de mayor alcance', frente al 4 'accidente con consecuencias de alcance local'.
El Gobierno de Japón anunció este mediodía (hora española) su decisión de elevar el nivel de catástrofe nuclear la escala Internacional de Eventos Nucleares (INES). En un principio esta se fijó en 4, y ahora ha pasado a 5. Este nuevo nivel pone el accidente de Fukushima al accidente que tuvo lugar en la central atómica Three Mile Island, en Harrisburg (Pennsylvania, EE UU) en 1979, considerado el peor accidente nuclear después de Chernóbil. El máximo es el 6, y que equivale a lo que ocurrió en Chernóbil en 1986.
El primer ministro de Japón, Naoto Kan, se dirigió este mediodía a la población. "No debemos dejar que el pesimismo nos venza", ha dicho. La situación sigue siendo muy grave en la central, manifestó, pero ha añadido que confía en que "en un futuro cercano" se pueda controlar.
La temperatura ha aumentado en las piscinas de desechos nucleares de los reactores 5 y 6 de la central nuclear de Fukushima, las consideradas más seguras hasta ahora. Respecto al reactor 5, el agua del estanque de combustible usado alcanzó ayer, a las 18.00 GMT, una temperatura de 65,5 grados, un aumento de 2,8 grados respecto a la última medición conocida del día anterior. No existen datos sobre la temperatura del agua en la piscina de la unidad 4. La última disponible es del día 15 de marzo, cuando marcó los 84 grados centígrados, más del triple de los niveles normales de 25 grados. Andrew Graham, asesor científico del director general del OIEA, Yukiya Amano, declaró el jueves a la prensa en Viena que la situación en el reactor 4 de la planta atómica es la "de mayor preocupación", ya que no se sabe nada sobre la temperatura ni el nivel de agua en las piscinas de combustible nuclear usado. Así, los expertos del OIEA no descartan que el líquido haya empezado a hervir.
En todo caso, las medidas desesperadas llevadas a cabo por el ejército y los operarios de Tepco comienzan a dar frutos. Los responsables de la Tokyo Electric Power (Tepco), la compañía que opera la central, han confirmado en rueda de prensa que la radiación -que ya había descendido durante el día de ayer cerca de 20 puntos- ha disminuido ya hasta los 279,4 microsieverts por hora. La televisión japonesa NHK informó hoy que está previsto que en la tarde del viernes (hora local) se lleve a cabo una nueva operación para arrojar agua. 130 bomberos han sido enviados desde Tokio a Fukushima para apoyar en las labores. En paralelo, expertos de la Agencia de Seguridad Nuclear sospechan que el humo del reactor 2 podría proceder de la piscina de refrigeración o de una explosión en la cámara que la alberga, aunque todavía no han podido confirmar este extremo.
Entretanto, la Compañía Eléctrica de Tokio (TEPCO), que explota la central, avanza en los trabajos de conexión a la red que permitirán poner de nuevo en marcha los sistemas de refrigeración. Ayer por la tarde en España el Organismo Internacional para la Energía Atómica anunció el tendido del cable, un paso clave para multiplicar la capacidad para refrigerar la nuclear, aunque faltaba por ver el estado de los equipos.