Claves sobre el crudo libio
Los problemas políticos actuales en Libia están teniendo repercusiones negativas en su capacidad de producir y transportar petróleo y gas. Actualmente, la producción de petróleo en crudo ha descendido a la mitad de su tasa de 1,6 millones de barriles diarios anterior a la crisis, mientras que las exportaciones de gas se han ralentizado. Teniendo en cuenta que antes de las revueltas, Libia representaba solamente el 2% de la producción global de petróleo y el 0,5% de la producción mundial de gas, podemos sentirnos tentados a considerar la interrupción como un obstáculo de menor importancia. Sin embargo, la producción de hidrocarburos en Libia es mucho más importante de lo que simplemente implica su cuota global:
l Es importante para los precios internacionales del petróleo, y en última instancia, para la economía mundial. Desde el inicio de la crisis de Libia, los precios mundiales del petróleo han aumentado más de un 10% debido a la inquietud provocada por posibles cortes de suministro, y por un posible contagio político en la región. Al haber aumentado los precios del petróleo, también se ha incrementado la preocupación por el deterioro del crecimiento económico, especialmente en los países desarrollados, donde el poder adquisitivo del consumidor se está viendo cada vez más afectado. Y en los países emergentes, el impacto inflacionista de unos precios del petróleo más altos es un aspecto negativo, que complica los retos ya significativos para los responsables de la política monetaria. Estos retos económicos globales son aún más importantes dado que el repunte se produce en el contexto de una tendencia alcista ya iniciada a finales del pasado septiembre.
l Es importante, especialmente para Europa. Libia es un proveedor muy importante de petróleo y de gas para Europa, dada su proximidad geográfica y sus vínculos históricos. Cabe destacar que alrededor del 27% del total de las importaciones de crudo de Italia provienen de Libia, mientras que Grecia obtiene el 15% de sus importaciones de este país, y España más del 10%. Esta inquietud se ha visto aumentada por el hecho de que la alta calidad del petróleo crudo de Libia no es fácilmente reemplazable en los mercados internacionales, especialmente por parte de Arabia Saudí, que posee gran parte del exceso de capacidad de la OPEP. Teniendo en cuenta la antigüedad de las refinerías europeas, muchas de las cuales pueden tener dificultades para procesar crudo pesado, esto ha hecho que los mercados del petróleo barajen soluciones alternativas, que podrían incluir el intercambio de los embarques de crudo de África Occidental con Asia.
l Es importante para los vecinos de Libia: el cierre de la producción de petróleo de Libia está teniendo importantes repercusiones para sus vecinos inmediatos, Túnez y Egipto, que a su vez han experimentado sus propias convulsiones políticas. La industria petrolífera y de gas de Libia normalmente da trabajo a miles de trabajadores inmigrantes, muchos de los cuales están abandonando el país de forma masiva, causando un problema humanitario y económico.
Asimismo, Libia es un importante socio comercial para sus vecinos, importando cantidades significativas de productos alimenticios frescos y procesados de Túnez, por ejemplo. Las perspectivas de estas importaciones están decayendo, al menos a corto plazo, a medida que se ralentiza la producción de petróleo y de gas y se debilita la economía libia. Esto representará una carga bastante negativa para las incipientes democracias de la región, que están luchando por su existencia.
l Finalmente, es importante para las perspectivas económicas y políticas de Libia a largo plazo: el petróleo y el gas han sido siempre el pilar principal de la economía libia, puesto que representan más del 25% de la actividad económica y el 95% de los ingresos de exportación. La interrupción súbita de la producción y el efecto en cascada en otras áreas de la economía van a pasar factura a las condiciones económicas generales en el corto plazo.
El futuro económico y político de Libia dependerá principalmente de que se encuentre una solución a la violencia actual y al aparente impasse entre el coronel Gadafi y las fuerzas de la oposición. Pero con el tiempo, la reanudación de la producción de hidrocarburos del país, junto con el posible desbloqueo de las importantes cantidades de activos mantenidos en el extranjero (la mayor parte de los cuales fueron acumulados por los pagos del petróleo) podría ser un elemento importante en cualquier esperanza de una transformación política duradera.
Ann Wyman. Jefe de análisis de mercados emergentes de Nomura