Lumumba frente a Balduino
Ahora que Occidente contempla con fruición las revueltas populares en el norte de África, se cumplen 60 años del asesinato de un líder africano a manos de los intereses europeos. Los protagonistas de aquella tragedia se reencuentran en Bruselas gracias a una gran retrospectiva del pintor belga Luc Tuymans.
La retrospectiva de Tuymans (Mortsel, 1958), vitoreada por la crítica internacional, permite el reencuentro póstumo y pictórico de Lumumba con Balduino. El entonces rey de Bélgica, según la investigación llevada a cabo por el Parlamento belga en 2001, fue alertado al menos una vez de que la vida del congolés corría peligro y, como mínimo, no hizo nada para evitar su asesinato.
Una tercera obra, Chalk, evoca los dos dientes que, al parecer, le arrancaron a Lumumba después de su ejecución (Hugo Claus también dedicó un poema a ese episodio).
Los retratos de Lumumba y de Mwana Kitoko (bonito hombre blanco) convivirán en el Palacio de Bellas Artes de Bruselas hasta el próximo 8 de mayo. Después regresarán a sus respectivas colecciones en el MOMA de Nueva York y el SMAK de Gante.
En la exposición, por cierto, también cuelgan obras relacionadas con atrocidades más recientes, como el famoso retrato de Condolezza Rice.
Y quien desee ver la última producción de un pintor con contundentes opiniones sobre Tàpies y Barceló, puede hacerlo hasta el 12 de marzo en la galería Zeno X de Amberes.
Imágenes: Lumumba (óleo sobre lienzo, 2000) y Mwana Kitoko (óleo sobre lienzo, 2000), tomadas de la web del Bozar.