Asalto frustrado al 11.000

Los 11.000 puntos se le resisten al Ibex. Después de tocar un máximo intradía en los 10.985 y de coquetear con los números rojos, el selectivo cerró en 10.922 puntos, un alza del 0,63% con las inmobiliarias como protagonistas.

El Ibex logró cerrar con subidas una sesión de altibajos en la que la falta de referencias convirtió la lucha con los 11.000 puntos en principal atractivo de la jornada. Las alzas fueron mayores en otros mercados europeos, mientras que el Ibex vio en parte diluida la ventaja con la que ha cotizado en las últimas semanas. El repunte de la prima de riesgo ha tenido bastante que ver en este cambio de tendencia, que en todo caso no impidió al Ibex avanzar 0,63%, hasta los 10,922 puntos.

Así, tras un arranque dubitativo, la Bolsa optó por atacar de nuevo los 11.000 puntos. La relativa calma en el mercado de deuda, la ausencia de sobresaltos derivados de la crisis egipcia -el Brent sigue por encima de los 100 dólares pero no se encarece significativamente- y la mejora de los futuros sobre los índices estadounidenses permitieron a las Bolsas europeas atacar los máximos. En el caso del Dax alemán, el indicador marca el nivel más alto desde que en enero de 2008 el trader Jérome Kerviel hundiese los mercados de medio mundo. Los índices europeos ganan entre el 0,5% y el 1%, y el Ibex tocó 10.985.

En este primer tramo de la jornada, la operación de compra de Santander sobre el banco polaco Zachodni llevó a la firma española avanzar más del 1%, mientras BBVA se acercaba al 2%. Pero los dos grandes bancos cambiaron de tendencia para arrastrar a la baja al Ibex a partir de mediodía. El sector inmobilario, en todo caso, fue protagonista indiscutible de las subidas más abultadas. Quabit ganó el 36% y más que duplica su precio en la última semana, y ha arrastrado en su espiral compradora a Fergo o Urbas.

A última hora, y gracias a una positiva apertura de Wall Street, volvieron las ganancias. Pero éstas fueron de menor calado que en otros mercados europeos. Nuevamente la prima de riesgo volvió a ser noticia; tras la falta de acuerdo entre los líderes europeos para ampliar el fondo de estabilidad, los países periféricos volvieron a verse castigados. El diferencial entre el bono español y el alemán a 10 años volvió a los 200 puntos básicos. La subida del Ibex, un 0,63%, se quedó en todo caso algo corta respecto a otros indicadores europeos.