Atractivo en emergentes, bonos y fondos
Los pronósticos de mercado difieren entre dos campos opuestos: los optimistas y los pesimistas, los movimientos van de una punta a la otra dependiendo del dato publicado y se hace muy difícil anticipar estas reacciones. Sin embargo, e incluso en este ambiente, hay algunos temas de inversión interesantes.
En primer lugar, los bonos high yield. Los tipos de interés están muy bajos y deberían permanecer así durante un periodo relativamente largo. Además, el rendimiento en los instrumentos libres de riesgo, depósitos, bonos gubernamentales o contratos europeos de seguros de vida es bajo, la renta variable está muy volátil y el riesgo es la característica dominante. En este entorno, los bonos high yield aumentan su atractivo. Se trata de una clase de activo expuesta al riesgo de impagos, pero muy bien remunerada; en Europa ha alcanzado ya cierta madurez.
En segundo lugar, están los mercados emergentes. Estas economías han sufrido la crisis reciente al igual que las regiones desarrolladas, pero han sido capaces de volver al crecimiento de forma rápida. Globalmente, la perspectiva de crecimiento de los llamados países desarrollados es del 2,6% mientras que el crecimiento de los países emergentes debería alcanzar el 6,8%. Por lo tanto, tiene sentido invertir, no sólo a través de acciones sino también por medio de bonos.
Finalmente, hay oportunidad en los newcits (fondos que imitan estrategias de hegde funds). En un escenario económico muy incierto, los gestores de hedge fund se convierten en los héroes de la gestión flexible. Sin embargo, hasta hace muy poco era muy difícil para los inversores minoristas acceder a estos fondos; pero el lanzamiento de los newcits los ha hecho accesibles para asesores de gestión de patrimonios y sus clientes, sobre todo a través de productos de seguros de vida.
Olivier Neau. Consejero delegado de Edmond de Rothschild IM