La debilidad de EE UU pone en jaque los 10.000 puntos del Ibex
El Ibex luchó ayer duramente por proteger los 10.000 puntos y logró conservarlos al cierre tras caer el 1,65%. El mal dato de viviendas de segunda mano de EE UU aceleró las ventas en toda Europa y reavivó el miedo de los inversores ante un crecimiento económico del gigante estadounidense más débil de lo previsto.
El foco de inquietud de los mercados reside ahora en Estados Unidos y el mercado recibió ayer un dato macroeconómico preocupante que desató de nuevo las ventas en las Bolsas a un lado y otro del Atlántico. El Ibex a duras penas logró salvar los 10.000 puntos y cerró en los 10.052,30, tras encajar una caída del 1,65%. El selectivo retrocede así a niveles de hace un mes y pierde todo lo que había ganado tras la publicación de las pruebas de estrés a la banca europea, que habían logrado relajar de forma transitoria el miedo a las suspensiones de pagos y la insolvencia financiera.
Pero las Bolsas no han tardado en encontrar un nuevo argumento para el desánimo, confirmando de paso que el fondo del mercado sigue siendo negativo. La principal preocupación está ahora en el peligro a una nueva ralentización de la economía, en especial en Estados Unidos, una amenaza que no había llegado a desaparecer desde el comienzo de la crisis pero que ahora regresa al primer plano. Según Standard & Poor's, Estados Unidos se enfrenta nada menos que a una "posibilidad realista" de un patrón de estancamiento económico similar al de Japón.
Con estas referencias, el detonante para las caídas fue ayer la publicación del dato de venta de viviendas de segunda mano en Estados Unidos, que se derrumbó en julio el 27,2% mensual, la mayor caída desde 1999, cuando empezó a contabilizarse el dato. Después del flojo cierre neoyorquino de la víspera y de las pérdidas del Nikkei, acosado por la apreciación del yen, las Bolsas europeas ya habían comenzado la jornada con recortes, que se ampliaron al conocerse el indicador inmobiliario estadounidense. Así, tras una apertura en Wall Street teñida de rojo, el Ibex llegó a perder el 2,6%, hasta los 9.957,4 puntos. Suavizó el descenso al cierre, al igual que el resto de Bolsas europeas: el Euro Stoxx perdió el 1,74%; el Dax, el 1,26%; el FTSE, el 1,51% y el Cac, el 1,75%. Muy poco caló el optimismo que había cundido en la sesión precedente ante las numerosas operaciones corporativas en Estados Unidos. En Wall Street, el Dow Jones perdió el 1,32%; el Nasdaq, el 1,66% y el S&P, el 1,45%, muy cerca del soporte decisivo de los 1.040 puntos. "El inversor decide a muy corto plazo. El tono del mercado sigue siendo negativo y hay un tema de fondo preocupante, el débil crecimiento económico, más débil de lo esperado", sostiene Alberto Roldán, director de análisis de Inverseguros.
Para Joaquín Casasús, director general de Abante, "ahora el frente que preocupa a los mercados es el crecimiento de Estados Unidos, pero no deja de ser el escenario base, el mercado ya contaba con ello". En su opinión, la situación actual dista mucho del tremendismo previo a la publicación de los test de estrés a la banca, cuando se dudaba abiertamente de la capacidad de pago de algunas de las economías de la zona euro, incluida la española.
Pero la aversión el riesgo sigue siendo palpable y en jornadas como la de ayer, se reflejó de nuevo en la afluencia del dinero hacia los activos de deuda más seguros, en perjuicio de la renta variable. La rentabilidad del bono alemán dio ayer un paso más en su camino descendente y marcó un nuevo mínimo histórico en el 2,18%, mientras el diferencial de la deuda irlandesa se amplió a máximos de 318 puntos básicos, muy por delante de los 182,8 puntos de la deuda española.
Los analistas técnicos recuerdan que la cota clave está en los 9.800
La situación técnica de los principales índices europeos se ha deteriorado considerablemente en las últimas sesiones. También en Estados Unidos las órdenes de venta han acercado hasta cotas límite al S&P 500 (la clave está en los 1.040 puntos). Los expertos en análisis fundamental advierten del incierto futuro de la economía mundial, pero los técnicos señalan que no hay que adelantarse a los acontecimientos."El Euro Stoxx 50 y el Ibex 35 respetaron al cierre de ayer las directrices alcistas que habían desplegado desde los mínimos de junio. En el caso del selectivo español, el aspecto se deterioraría notablemente si pierde los 10.000 puntos -por donde pasa actualmente la directriz-, pero incluso así quedarían los 9.800", señala un operador.Desde Noesis, señalan que, en caso de que se perforara dicho soporte, se desplegaría un escenario correctivo contundente. El objetivo de corrección se situaría en torno a los 8.500 puntos, los mínimos que marcó el pasado mes de junio. A corto plazo, el mínimo intradía de ayer es un soporte.
El euro y el franco
El franco suizo, revalidando su fama de moneda refugio ante un futuro incierto, marcó ayer un nuevo máximo histórico frente al euro en 1,3049 unidades por cada moneda única.El Banco Nacional de Suiza dejó de intervenir en el mercado monetario el pasado junio, tras haber cuadriplicado sus reservas de divisas extranjeras frente a los 15 meses anteriores, según Bloomberg. Pero esta escalada del franco puede obligarle a intervenir de nuevo.