La repercusión de la crisis
El impacto de la innovación financiera ha sido una de las causas más importantes de la crisis financiera global del 2007-2009. La mayoría de la gente obtuvo buenos resultados durante los años del boom financiero, pero ninguno consiguió mejores resultados que los banqueros de inversión y los hedge funds, que utilizaron sus cerebros para innovar en nuevos productos financieros y reinventar las finanzas. ¿Deberíamos haber sabido que esta innovación financiera era peligrosamente arriesgada? En el verano de 2007 una secuencia de eventos desencadenó el inicio de la crisis financiera global: la caída de Northern Rock en Inglaterra, rescates del gobierno en America, Inglaterra y muchos otros países, el casi-colapso del sistema financiero internacional, y finalmente, la peor recesión económica global desde 1930.
¿Cómo llegamos a tal situación? En una era de globalización financiera y modelos de riesgo sofisticados, los derivados financieros estaban basados en la idea de empaquetar los préstamos y venderlos a un amplio grupo de inversionistas a nivel global, con lo que el riesgo se distribuía a nivel mundial. Sin embargo, estos instrumentos amplificaban el riesgo y produjeron el mayor colapso en la confianza financiera de los inversionistas. Esta inestabilidad significa que el mundo requerirá años de ajuste asociados al mayor shock financiero desde la Gran Depresión.
El objetivo del libro es establecer la secuencia de eventos durante 2007-2009 en un contexto muy amplio. Ninguna explicación sería completa sin examinar el estallido de la vivienda en Inglaterra y el estallido de las hipotecas subprime en América. Estos estallidos provocaron la caída de Bear Stearns y su compra por parte de JP Morgan con la ayuda de la Reserva Federal en marzo de 2008, el rescate de Fannie Mae y Freddie Mac por parte del gobierno americano el 7 de septiembre de 2008, y finalmente el colapso de Lehman Brothers el 15 de septiembre de 2008.
El libro también examina donde la crisis deja a la economía y al mundo global. El veredicto es que lo peor de la crisis está detrás de nosotros, aunque las repercusiones sobre la situación económica están pendientes de resolverse. Así mismo, el libro provee una guía autorizada y accesible de qué pasó, donde, y cuándo con sugerencias prácticas sobre qué ocurrirá próximamente.
Emilio Navarro, profesor de Economía de Esade