Los analistas castigan a Gamesa por su resultado
UBS, Nomura y Caja Madrid Bolsa rebajan sus recomendaciones.
La revisión a la baja de los objetivos de Gamesa para 2010 y 2011 y los resultados del segundo trimestre han decepcionado profundamente a los analistas de Bolsa, que están rebajando sus valoraciones entre el 46% y el 26%. El valor, después de desplomarse un 11,97% el viernes, mantiene esta semana la senda bajista y ayer cayó otro 0,95%, hasta los 6,553 euros por acción.
Nomura rebaja su precio objetivo de 13 a 9,50 euros. Los ingresos del segundo trimestre fueron un 7% menor de lo esperado por sus analistas, el Ebit un 5% y el beneficio neto un 12% menor. Sólo el beneficio por acción estuvo en línea con sus previsiones. De cara a este año rebaja su BPA previsto un 35% y un 44% para 2011, después de la rebaja de los objetivos de la compañía en aerogeneradores, debido a la incertidumbre regulatoria en Italia y España.
Pese a ello, la entidad de análisis japonesa sigue recomendando comprar las acciones de Gamesa porque, en su opinión, hay indicadores positivos como un volumen de pedidos de 200 megavatios en julio, después de la desaceleración del segundo trimestre, y que las fábricas de India y China están a pleno rendimiento. "Es un signo de éxito de la estrategia de la compañía de expandirse geográficamente".
UBS opina, por su parte, que los mercados de Centroamérica y África ofrecen visibilidad limitada. El banco francés ha sido más drástico rebajando el precio objetivo de Gamesa, de 12,81 a 7 euros por acción, y ha cambiado su consejo de comprar a neutral.
En su informe destaca que la empresa está perdiendo cuota de mercado respecto a Vestas y Siemens. "Estamos preocupados de que se pueda convertir en un problema estructural". Gamesa, señalan, ha obtenido pocas órdenes en 2010 de nuevos clientes, "después de centrarse en unas pocas cuentas clave durante varios años".
Después de terminar sus negociaciones con la empresa alemana Bard para el desarrollo de proyectos eólicos marinos, porque según Gamesa no creaba valor para el accionista, la compañía "no tendrá turbinas offshore en su catálogo antes de 2014", advierte UBS.
El informe llega más allá e incluso considera la posibilidad de que a sus precios actuales, con un valor de empresa (EV) igual a 0,5 veces las ventas estimadas en 2011, haya grupos industriales interesados en comprar el sexto productor mundial de turbinas.
Francisco Rodríguez, analista de Banco Sabadell, añade a la lista de problemas de Gamesa que está sufriendo más presión en los precios de los productos. Dada la incertidumbre regulatoria, pone la valoración de la compañía bajo revisión. Caja Madrid Bolsa ha bajado su precio objetivo a su vez, de 14,2 a 7,72 euros, un 46% menos, y su consejo de comprar a mantener. Credit Suisse lo baja de 9 a 8,50 euros, aunque no varía su consejo neutral.
Renta 4, que rebaja su consejo de mantener a infraponderar, señala entre los aspectos positivos para el valor que la deuda financiera se ha reducido "significativamente", un 38%, hasta un ratio de 1,1 veces el Ebitda, "en niveles conservadores y por debajo del objetivo de la empresa", que está en 2,5 veces.
A juicio de la entidad española de análisis, los resultados confirman "la gran debilidad del sector", que afectan más a Gamesa por su mayor dependencia del mercado español respecto a sus competidores. De cara al futuro, Renta 4 no ve avances regulatorios en Estados Unidos que permitan vender parques.
Las acciones de Gamesa han caído un 8,95% en lo que va de año, frente al 43,55% del Ibex, y en las últimas siete sesiones ha caído un 15,8%. Es el segundo peor valor del selectivo en 2010, por detrás de Sacyr. El informe de Renta 4 cree que la revisión de objetivos seguirá presionando a la baja a los títulos a corto plazo.
La compañía
Las ventas alcanzaron en el primer semestre los 1.033 millones de euros, un 36% menos que el año pasado, en línea con el 37,5% menos de la previsión de consenso.El Ebit fue un 58,9% menor que el del primer semestre de 2009, también en línea con el consenso.El beneficio neto fue de 22 millones de euros, un 72,5% menos que el año pasado, algo mejor que el 75% menos que preveían los analistas.