Cajastur da a CAM más influencia en el SIP para mejorar la convivencia
En la tarde de hoy se formalizará la creación de la sexta entidad financiera del país. Cajastur, Caja Mediterráneo (CAM), Caja Extremadura y Caja Cantabria someten a votación el contrato definitivo del sistema institucional de protección (SIP). Para asegurarse el buen devenir de esta fusión virtual, el grupo asturiano -que lidera el proyecto al estar avalado por sus buenos ratios financieros- ha decidido ceder algo de influencia a su socia alicantina, de mayor magnitud en términos de balance.
"El contrato final que se ha negociado conlleva una flexibilización de los términos del protocolo en favor de CAM para reconocer la valía de su equipo directivo. El objetivo es lograr una integración donde todos ganan", apuntan fuentes próximas a Cajastur.
En las últimas semanas había trascendido el malestar existente entre algunos representantes de CAM con el documento. Recelaban del poder que acumulaba Manuel Menéndez. El presidente de Cajastur será consejero delegado del nuevo SIP, mientras que a Modesto Crespo, máximo responsable de la caja alicantina, le corresponde la presidencia de la alianza. Este cargo tiene naturaleza institucional. El mandato de cada uno dura seis años. Mientras, los primeros directivos de Caja Extremadura, Víctor Bravo, y Caja Cantabria, Enrique Ambrosio, ocuparán sendas vicepresidencias en el SIP.
El Banco de España otorgó su visto bueno al protocolo de intenciones el 29 de junio.
Nombramientos
Los socios ya han decidido que Roberto López Abad (CAM) sea director general del SIP y Felipe Fernández (Cajastur) director general corporativo. La entidad alicantina y la asturiana controlarán un 40% cada una. Extremadura y Cantabria se reparten el otro 20%.