Los edificios sostenibles ahorrarían un 30% de la factura energética en España
Construir o adecuar los edificios con criterios de eficiencia y sostenibilidad le ahorraría a España hasta un 30 por ciento de la factura energética y del volumen de las emisiones contaminantes que contribuyen al cambio climático global, según la Fundación 'La casa que ahorra'.
Los edificios consumen un 41% de la energía total en la Unión Europea y sin embargo hace ya tiempo que disponemos de tecnologías para reducir muy significativamente su gasto, lo cual tendría un gran impacto positivo en la economía y en el medio ambiente. En suma: en las casas y edificios está en buena medida la clave para consumir menos energía, reducir la huella ambiental y abaratar la factura energética.
Así lo ha indicado hoy en Santander el presidente de la Fundación 'La Casa que Ahorra', Francisco Javier Fernández Campal, en su presentación de esta joven entidad sin ánimo de lucro a los alcaldes y cargos públicos presentes en las jornadas de la V Asamblea de la Red de Ciudades por el Clima.
Este encuentro ha sido organizado por la FEMP bajo los auspicios del alcalde de Santander, Íñigo de la Serna, vicepresidente de la Red, y supone la primera presentación pública de la Fundación 'La Casa que Ahorra'. El presidente de la Fundación indicó que uno de los lemas rectores de su entidad es que "la energía más limpia y alternativa es la que no se despilfarra".
Fernández Campal señaló que es fundamental una mayor conciencia de la sociedad, las empresas y las administraciones sobre la enorme contribución que la edificación sostenible puede realizar para conseguir los objetivos del 20/20/20 de la Unión Europea para 2020: un 20% menos de gases de invernadero, un 20 por ciento más de energías de fuente renovable y un 20% más de eficiencia energética.
"Para lograr esto en Europa y España con un planteamiento realista y contando con las tecnologías ya disponibles, es necesario mirar directamente a la sostenibilidad de nuestras casas particulares y edificios públicos", afirmó Fernández Campal, quien recordó que "el problema es que esa pérdida de energía es invisible, y por ello nos cuesta concienciarnos de lo mucho que se escapa a través de muros, tejados, suelo, ventanas, puentes térmicos y filtraciones indeseadas de aire". "Eso que se escapa supone dinero y supone contaminación", resumió.
El presidente de la Fundación, un ingeniero industrial con más de 25 años de experiencia técnica y de gestión en este sector, manifestó el interés de su colectivo en colaborar con el Pacto de los Alcaldes (Covenant of Mayors), porque "el importante papel de las administraciones municipales en toda Europa es esencial para cumplir las metas ambientales".
"Hay que trabajar informativamente y en la nueva cultura edificativa desde el nivel local, que es el más cercano a los ciudadanos", argumentó. "Por ello los ayuntamientos españoles son uno de nuestros aliados principales en esta labor pedagógica y de divulgación científico-técnica", dijo Fernández.
El concepto "casa que ahorra" y la rehabilitación
Una "casa que ahorra" se basa en factores como la orientación favorable, el diseño compacto, el aislamiento óptimo, los vidrios de alta eficiencia térmica, la ventilación adecuada y el uso de materiales sostenibles.
Además de su positivo efecto energético, una "casa que ahorra" también incrementa el confort acústico de la vivienda (que es un gran problema en numerosas zonas de muchas ciudades españolas) sin olvidar la protección pasiva contra incendios. Nos ofrece en definitiva confort, salud y seguridad con el mínimo consumo energético, gasto económico e impacto medioambiental.
Entre sus líneas de trabajo, la Fundación subraya la relevancia primordial de la rehabilitación: 8 de cada 10 edificios españoles tienen más de 20 años de antigüedad y no fueron construidos con criterios de eficiencia energética como los previstos por el actual Código Técnico de la Edificación.
Por tanto, una mayor mentalidad social sobre cómo aprovechar el mantenimiento y rehabilitación para crear ciudades sostenibles es imprescindible, manifestó el Presidente de la Fundación 'La Casa que Ahorra'. "La gran actuación será rehabilitar con patrones energéticos mejores, ahorrativos de consumo y económicamente rentables en pocos años", agregó.
Objetivos inmediados de la fundación
Fernández Campal informó a los asistentes que la Fundación busca desarrollar en el ámbito de toda España esta nueva cultura, mediante acciones de información a la ciudadanía, investigación e innovación, colaboración con las administraciones y diálogo con todos los sectores implicados en el proceso de la edificación.
El presidente agradeció a la FEMP y al alcalde de Santander su invitación a presentar 'La Casa que Ahorra' ante un foro tan importante, y ofreció la cooperación de la Fundación para futuros proyectos educativos e informativos de los municipios.
La Fundación 'La Casa que Ahorra' ha sido constituida por importantes entidades internacionales con gran arraigo en España, pertenecientes al sector de la edificación y que son líderes en innovación tecnológica. Aunque todavía es muy joven, la Fundación participará en acontecimientos destacados, como el evento Solar Decathlon Europe 2010, que comenzó ayer en Madrid.
Su objetivo es, en suma, convertirse en poco tiempo en una fundación de referencia para la promoción de una nueva cultura de las ciudades sostenibles, con especial atención a hogares y a edificios públicos desde el punto de vista de la eficiencia energética y la reducción del impacto ambiental.
Fernández Campal consideró el marco paisajístico y arquitectónico de La Magdalena como "un emplazamiento extraordinario para poner en marcha la trayectoria pública de nuestra Fundación, que aquí ha tenido, por decirlo con lenguaje del cine, su preestreno ante un público muy cualificado", por lo cual "estamos agradecidos a los santanderinos y a todos los cántabros por su hospitalidad", concluyó.