Zapatero contra todos
La cita es mañana, mucho antes de mediodía, porque la última cumbre del semestre español comienza a las 10 de la mañana en la sede del Consejo Europeo. Y al presidente del Gobierno le espera un recibimiento mucho más gélido que cuando se estrenó hace seis años desbloqueando el proyecto de Constitución europea paralizado por su predecesor José María Aznar.
La relación de España con la Comisión Europea y con algunos de los socios comunitarios, Alemania en particular, se ha deteriorado de manera significativa durante los últimos seis meses.
La Comisión ha ralentizado o boicoteado algunas de las iniciativas de la presidencia española, a pesar del apoyo de Madrid a la reelección de su presidente José Manuel Barroso. El duelo ha llegado a rozar la violencia dialéctica en el expediente sobre la orden europea de protección de mujeres maltratadas, impulsada por España y rechazada por la vicepresidenta de la CE y comisaria de Justicia, Viviane Reding.
Berlín, por su parte, ha intentado acorralar a España a base de presión sobre su deuda, para que adopte un plan de ajuste fiscal draconiano y reformas estructurales drásticas. Zapatero ofrecerá mañana a sus inquisidores una reforma del mercado laboral, un compromiso de reforma del sistema de pensiones, un recorte de gasto de 15.000 millones de euros y otro de 18.000 millones por concretar. A pesar de esos sacrificios, Zapatero corre el riesgo de tener que abandonar la reunión tan solo como habrá llegado.
Imagen: Cartel de High Noon (sólo ante el peligro), tomada de la web www.dvdtalk.com.