Abertis pide a ACS y La Caixa que sus ventas de capital sean graduales
Máxima cautela sobre una hipotética alteración en el accionariado de Abertis. Su presidente, Salvador Alemany, dijo ayer que no espera grandes cambios, pero pide a ACS y La Caixa que sus posibles intenciones de venta se ejecuten de forma gradual. La firma analiza entrar en China, India y Brasil, así como nuevas líneas de negocio.
El tablero de juego ha dado un vuelco en el campo de las concesiones. A juicio de Salvador Alemany, primer ejecutivo de Abertis, los proyectos requieren la aportación de más fondos propios de las empresas, debido a la escasez de financiación, y los distintos jugadores deben abrirse a nuevos mercados para rejuvenecer la cesta de activos. "Se están dando oportunidades para inversores a largo plazo en infraestructuras", destacó ayer en un encuentro con periodistas previo a la junta de accionistas.
La compañía participada por La Caixa y ACS reiteró su posición ofensiva y declaró la intención de arrancar "proyectos exploratorios" en China e India. Brasil y Estados Unidos son los otros dos puntos del mapamundi en que Alemany y su equipo han puesto el foco. A la vista de una creciente contribución del capital privado en la financiación de infraestructuras públicas, la entidad también ha abierto la puerta a una posible incursión en terrenos como el ferroviario. En todo caso, aseguró Alemany, "el momento actual requiere que nos centremos en nuestros actuales negocios".
El ejecutivo, que ayer presidió su primera junta de accionistas escoltado por los vicepresidentes Isidro Fainé y Florentino Pérez, extremó su habitual cautela a la hora de tratar una hipotética acción de desinversión de los accionistas de referencia. "Mi impresión es que nuestros accionistas tienen toda la intención de permanecer en el capital", dijo. Y sólo matizó que "lo que preocuparía al equipo directivo es que se pusiera un gran volumen de papel en el mercado de una forma que no fuera gradual".
Peso de las cajas
Entre líneas se pudo leer un mensaje a ACS y La Caixa cuando Alemany recordó que el actual peso de las cajas en el capital de la operadora es del 5,6%, frente al 18% que rondaban en 2006. Un descenso notable que se ha materializado en distintas operaciones y que "no ha tenido impacto sobre la estabilidad de la compañía y el valor de Abertis".
Desde la cúpula de la operadora se afirma que se mantiene un contacto constante con la comunidad inversora -fuentes financieras aseguran que con especial atención a fondos de inversión ubicados en Canadá y Australia-, pero Alemany señala que no jugará el papel de buscar compradores para cubrir hipotéticas ventas protagonizadas por La Caixa o ACS.
El presidente de la constructora, Florentino Pérez, se negó a dar pistas al término de la junta sobre su estrategia en Abertis, que siempre se realizaría de acuerdo con La Caixa. Isidro Fainé, por su parte, insistió en sus quejas sobre la escasa valoración que existe de la presencia de accionistas estables con vocación de largo plazo en las empresas, "como es el caso de La Caixa y ACS".
Vencen 500 millones de deuda
El cuadro de vencimiento de deuda de Abertis marca compromisos de amortización para 2010 por unos 500 millones de euros. De esa cantidad, aproximadamente la mitad podría ser devuelta a los bancos y el equipo financiero trabaja en la refinanciación del otro 50%. La deuda neta de la empresa, de 14.590 millones, está firmada a una media de siete años y a un tipo fijo medio del 4,56%.La junta aprobó el nombramiento de Francisco Reynés como consejero ejecutivo por parte de Criteria y de Julio Sacristán como consejero a propuesta de ACS.El dividendo se ha mantenido en 0,60 euros por título, tras la aprobación ayer de un pago complementario de 30 céntimos. La empresa mantiene su habitual ampliación de capital liberada por la que entrega una acción nueva por cada 20 antiguas, por un importe de 105,5 millones. El pay out de Abertis alcanza el 65%.Alemany estimó un "ligero crecimiento de ingresos, Ebitda y beneficio neto" para este año.