Incertidumbre para la renta fija
Desde finales del año 2009 se ha venido intensificando el debate sobre la gestión de la reducción de los déficit dentro de la zona euro. La situación de Grecia que se conoció a finales de 2009 provoco que los mercados actuaran con preocupación y que los activos de renta fija aumentaran en riesgo, sobre todo las emisiones de Gobiernos y algunos activos corporativos.
Las últimas novedades sobre Grecia en donde se manifiesta un apoyo institucional desde los ministros de finanzas de la Unión Europea y el Banco Central Europeo despejan las incertidumbres de su posible default, pero una nueva situación parecida se ha trasladado a otros países periféricos con España a la cabeza.
No obstante, y a pesar de que los mercados se han tomado de forma muy negativa las últimas noticias, hay que destacar que España no es Grecia, ni por fundamentales ni por credibilidad y que el problema de la gestión de la reducción del déficit es arduo y necesitará un consenso político y de los agentes sociales. En EE UU llegarán al 4% sobre PIB en 2014, más tarde que lo exigido para los periféricos de la eurozona (3% en 2013).
En la última semana se han manifestado intensos movimientos en la renta fija de los periféricos de Europa, con efecto contagio en algunos corporativos y refugio en las principales referencias de Gobierno (EE UU y Alemania). Dejando de lado Grecia, que ha ido mejorando, el foco está ahora en Portugal y España. Como se esperaba la volatilidad ha ido pasando de país en país y de momento, puede persistir el castigo y la volatilidad. De momento no parece faltar demanda, la subasta a 3 años de deuda española ha sido sobredemandada 4 veces.
Dentro de los corporativos, se han conocido pocos cambios en el conjunto, aunque se aprecie un lógico contagio de algunas de las emisiones de empresas de los países que están en el ojo del huracán, como por ejemplo ha sido para las financieras españolas.
Ante esta situación, ¿qué podemos hacer con nuestras inversiones? Si hablamos de renta fija, hay que decir que el castigo en gubernamentales ha sido severo en el conjunto, pero no ha llegado a ser como en el caso griego, o dicho de otra forma, la rentabilidad-riesgo es mejorable. Esto no significa que debamos realizar ventas a cualquier precio, pero no parece que hoy por hoy estos activos sean excesivamente interesantes para invertir.
En el caso de la renta variable, el Ibex 35 ha sufrido una corrección más rápida que los índices europeos y americanos, ya que su valoración a principios de año era superior. Entendemos que aún pueden sufrir. Desde este punto de vista la recomendación pasa por mantener un mayor peso en Estados Unidos y dar cabida a Japón, en detrimento de Europa y, sobre todo, España.
Antonio Castilla. Socio director de CGA Patrimonios (family office)