Salgado asegura que España protagonizará la solución para Grecia
El duro castigo que los mercados infligieron días atrás a la Bolsa española por el contagio griego no ha sido suficiente para que el Gobierno y el PP se hayan dado una tregua en cuestión tan sensible. Ayer se midieron en el Congreso con un cruce de acusaciones.
La vicepresidenta económica, Elena Salgado, intentó sacar pecho ante la lluvia de duras acusaciones vertidas desde las filas del PP. El portavoz adjunto de Economía del principal partido de la oposición, Álvaro Nadal, cuestionó abiertamente el plan de ajuste presupuestario que por importe de 50.000 millones ha aprobado el Consejo de Ministros y emplazó al Gobierno "a sacar a España del saco de Grecia".
Sus argumentos se resumen así: El descrédito de la deuda pública española no da más de sí. Emitir con cien puntos básicos de diferencial una colocación de deuda pública de 2.500 millones de euros a tres años es un coste prohibitivo para España y no haber logrado colocar una emisión a veinte años de 2.000 millones porque subía demasiado el marginal de la emisión demuestra la situación tan complicada de la deuda española. A juicio de Nadal, España ha pasado de emitir deuda a la par que Alemania a formar conjunto del grupo de países peor situados junto con Grecia, Portugal, Italia y, en menor medida, Irlanda.
Con estos antecedentes y el alto nivel de endeudamiento del sector privado, argumentó Álvaro Nadal, el Gobierno no debiera haberse permitido disparar su deuda pública y, menos aún, aspirar a ganar credibilidad en los mercados tras aplicar estímulos fiscales que han supuesto 2,5 puntos de PIB a cambio, como mucho, de dos puntos de crecimiento. "España está en un saco que no le corresponde, el de los países peor valorados de la zona euro, y en función de cómo vaya el plan de rescate de Grecia nos irá desgraciadamente a nosotros", vaticinó el diputado del PP.
El Gobierno adelanta a mañana el reparto concreto por partidas de la reducción de gasto
Elena Salgado argumentó que la situación de las finanzas públicas griegas poco tiene que ver con la española, e informó que el Gobierno trabaja de forma activa con Francia y Alemania en la búsqueda de soluciones a la crisis de solvencia por la que atraviesa el país helénico. "Llevamos una semana intentando que los analistas no pongan a España en el mismo conjunto de países donde está Grecia, porque nuestra economía no tiene nada que ver con la griega. Respetamos los esfuerzos que está haciendo el Gobierno griego para salir de esta situación económica", abundó la vicepresidenta, "pero la economía española no es la economía de Grecia, y el PP no debería incidir en esa idea. España está participando en la búsqueda de una solución para los problemas" de Grecia, concluyó, y "será protagonista de la solución".
Salgado reveló que, mañana, el Consejo de Ministros detallará cómo afecta a las partidas de cada ministerio el acuerdo de no disponibilidad de 5.000 millones de euros decidido para este año, aunque las líneas generales pasarán, hasta 2013, por una reducción de un 4% en los gastos de personal y de un 15% en el capítulo de bienes corrientes y servicios. Falta por detallar en cuanto afectará el recorte a las partidas de inversión.
El enfrentamiento entre el Gobierno y el PP a cuenta de los problemas que genera para España su alto endeudamiento tuvo ayer un primer episodio en el Congreso en el cara a cara entre José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy. Este acusó al presidente de haber "dilapidado toda su credibilidad", mientras que Zapatero le exigió "responsabilidad" para no perjudicar la imagen de España frente a los mercados.
Fomento revisará cada euro del presupuesto
El ministro José Blanco ha pedido informes a cada una de las empresas del grupo Fomento en busca de reestructurar el Ministerio, ajustar costes y mejorar la eficiencia en la contratación de obras. Las claves pasan por integrar algunos organismos, reducir altos cargos, poner coto a los modificados en los presupuestos de obra y aplazar la ejecución de infraestructuras no estratégicas. En este sentido pone el ejemplo del AVE de Cantabria a Galicia.Fomento se ha convertido en el principal afectado por el recorte de 5.000 millones en el presupuesto aprobado para este año y ya tiene en marcha un "plan de eficiencia" que pretende ejecutar en tres meses para ahorrar 1.700 millones.Fuentes empresariales apuntaron ayer que la gran revisión podría centrarse en la Dirección General de Carreteras, que licitó en 2009 actuaciones por 728 millones. En el entorno de Blanco se hace énfasis en la idea de "hacer más con menos dinero". Las grandes actuaciones anunciadas en torno al AVE, autovías y puertos no deberían sufrir variaciones. Del mismo modo, sigue adelante el plan de colaboración público-privada por el que se pretenden invertir 15.000 millones hasta el final de la legislatura con el apoyo del BEI, el ICO, la banca privada y las constructoras.