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Planes extraordinarios de inversión pública

Las constructoras confían al gasto público su cartera de pedidos

La producción de materiales para el sector retrocedió a la mitad en 2009

Las constructoras de todo el mundo asisten con alivio a los anuncios efectuados por los gobiernos sobre la puesta en marcha en breve de planes extraordinarios de inversión pública. Según una encuesta elaborada por KPMG, las constructoras y concesionarias de obra civil admiten que han podido sortear mejor de lo previsto los efectos de la crisis gracias a proyectos que tenían en cartera antes del estallido de la recesión. Por eso, consideran crucial que los programas comprometidos no se demoren más de lo previsto para que las empresas puedan organizar sus plantillas a corto y medio plazo.

En España, el sector se mantiene atento al plan extraordinario de inversión en infraestructuras valorado en 15.000 millones de euros que ultima el Ministerio de Fomento. "Este programa de actuaciones contribuirá a que no se sequen las carteras, aunque son conscientes de que no es la única opción. Su negocio debe seguir creciendo y diversificándose", explicó ayer Elena Pisonero, socia responsable de Infraestructuras de KPMG. Según el último informe sobre el sector elaborado por la consultora, en Europa, Oriente Medio y África, el 55% de las empresas encuestadas considera que los planes públicos de estímulo suponen un aumento moderado o significativo de las oportunidades de cara a su negocio. El resto considera que apenas tendrá impacto. Así, al margen de estos planes de gasto, el estudio revela que, pese a la crisis, el 53% de las constructoras consultadas a escala internacional asegura haber elevado o mantenido estable su cartera , mientras otro 44% reconoce descensos. Otro dato para la esperanza es que, a pesar de la drástica caída detectada en la actividad, el 35% de las compañías consultadas decidió apostar por el talento y no redujo su plantilla.

Mientras tanto, el presidente de la Confederación Española de Asociaciones de Fabricantes de Productos de Construcción (Cepco), Rafael Fernández, señaló ayer que la producción de materiales cayó a la mitad durante 2009 y que esta tendencia descendente seguirá en los próximos años. "Serán una travesía por el desierto para las empresas de este sector auxiliar", apuntó durante su intervención en un foro organizado por la Asociación de Promotores Constructores de España (APCE).

El presidente de Cepco señaló que los fabricantes de materiales de construcción (azulejos, ladrillo, hormigón, cemento o piedra natural) tienen muy difícil su continuidad con un nivel de producción estimada para este año de 100.000 viviendas, frente al máximo de 660.000 alcanzado hace tres años.

A este hecho se ha unido, a juicio de Fernández, la insuficiencia de las medidas puestas en marcha por el Gobierno para impulsar el sector inmobiliario. "La viabilidad del sector residencial pasa por cambios en la política de suelo", apuntó.

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