Camino expedito para Caja Madrid

La decisión judicial de levantar la suspensión cautelar de las elecciones en Caja Madrid desbloquea, por fin, un largo y tortuoso camino que en nada ha beneficiado a la cuarta entidad financiera española. La medida abre la puerta a la renovación de los cargos y, si todo transcurre conforme a lo previsto, al nombramiento de Rodrigo Rato como presidente de la caja madrileña.

Los 14 meses transcurridos desde que comenzó el proceso electoral, en el que la entidad ha sido escenario de duras batallas entre las diferentes corrientes del PP en Madrid, son una prueba más de lo necesaria que es una reforma de la ley de cajas -anunciada anteayer por el presidente del Gobierno en el Congreso- que vaya en la dirección de despolitizar los órganos de gestión de estas entidades, la mitad del sistema financiero español.

Es imprescindible que Caja Madrid culmine con rapidez esta etapa y se dote de la estabilidad a largo plazo esencial en este negocio. Así podrá afrontar con seguridad unos retos de futuro que no son pequeños. Entre ellos, nada menos que la reestructuración del sector de las cajas en España, que en pocos meses afectará a más de la mitad de las entidades, o la fusión de Iberia con British Airways, en la que ha de estar especialmente atenta como accionista de referencia.