Las materias primas no son tan diferentes
En realidad casi todos somos un poco expertos en materias primas. Compramos pan (trigo generalmente), usamos automóviles que emplean derivados del petróleo y que cuentan con catalizadores cuyo componente principal es el platino, el gas natural de nuestros hogares, etc. Como activo de inversión son grandes desconocidos pero son algo habitual en nuestras vidas.
¿Qué tienen de interesante para invertir? Hay varias respuestas pero la más importante es que pueden generar rendimientos muy atractivos en los próximos años, debido al incremento de las necesidades de estas materias primas por parte de los países en vías de desarrollo.
En unos 15 o 20 años habrá 2.000 millones de personas más en lo que denominamos "clase media", todos consumiendo y necesitando aquello que nosotros necesitamos y consumimos ahora. Pero además son un tipo de activo que tiene escasa e incluso negativa correlación con activos tradicionales y por tanto son un elemento diversificador de primera magnitud. Finalmente, las materias primas están correlacionadas con la inflación, y a lo mejor ahora no es el momento de hablar de ella, pero que nadie piense que los precios van continuar a la baja si el crecimiento se instala en el mundo desarrollado.
Sin embargo . ¿no se corre más riesgo que en otros activos? Es la pregunta del millón pero la universidad de Yale se encargó de demostrar que generalmente la volatilidad (si la consideramos como medida válida de riesgo) es algo menor para las materias primas que para la Bolsa (2008 aparte claro). Por tanto, estamos en presencia de un activo con buenas perspectivas, descorrelaciona con respecto a otras clases de activos y no supone mayor riesgo. Es un activo a considerar, ahora que hay varias firmas ofreciendo productos con liquidez diaria.
José Manuel Olabarrieta. Director general de Vontobel para España y Latinoamérica