Lérida reclama más plazas hoteleras para atender a su nuevo palacio de congresos
Las 1.500 camas entre hoteles de tres, cuatro y cinco estrellas que ofrece la ciudad de Lérida a sus visitantes se han quedado cortas a juicio de su alcalde, Ángel Ros, y a la vista del crecimiento económico que supone la llegada del AVE, la próxima apertura de un aeropuerto y de un centro de convenciones.
En un encuentro con la prensa, celebrado ayer en Madrid, el regidor desveló que mantiene contactos con el sector hotelero para tratar de implantar en el corto plazo otro medio millar de camas "con el fin de responder a la demanda que previsiblemente promoverá el nuevo palacio de congresos, la Llotja de Lérida".
Levantada por Dragados y Obrum, la nueva instalación será de propiedad municipal, compartida entre Ayuntamiento (80%) y Mercolleida (20%). Su apertura está prevista para el próximo mes de enero, tras ser entregada a la gestión privada durante los próximos 15 años.
Ángel Ros desveló ayer que el grupo Paradís y el francés GL Events están pujando por un contrato en el que se prevén ingresos por unos tres millones de euros anuales. El operador se encargaría tanto de la agenda congresual como del área de restauración, dejando el apartado cultural en manos del consistorio. El adjudicatario pagará un canon fijo de 100.000 euros anuales más el 30% de los beneficios.