Economía y el PNV negocian ya en firme el pacto presupuestario
El Ministerio de Economía está utilizando al PNV como red de protección en una negociación presupuestaria que este año descansará, sobre todo, en los acuerdos con los grupos de la izquierda. La vicepresidenta Elena Salgado se reunió ayer con los nacionalistas vascos, pero anteriormente ya se había reunido con ellos en secreto.
El Consejo de Ministros aprobará este sábado en sesión extraordinaria el proyecto de ley de Presupuestos para 2010, que entrará en el Congreso el próximo martes. La vicepresidenta económica, Elena Salgado, mantuvo hace semana y media una reunión secreta con los principales portavoces del PNV en Madrid para acercar posturas y conseguir una especie de red de protección frente al riesgo de que los acuerdos con los grupos de izquierda se terminen torciendo. Ayer volvió a reunirse con ellos, esta vez con publicidad.
Al PNV no le interesa todavía reconocer los avances en esta negociación porque primero busca la unanimidad en el partido sobre las líneas rojas que no deben cruzarse en los contactos con el PSOE después del desalojo de Ajuria Enea sufrido tras las últimas elecciones vascas. Fuentes gubernamentales confirman, en todo caso, que las conversaciones están muy avanzadas y que las contrapartidas procederían del blindaje del Concierto Vasco y de la aprobación de los presupuestos en las diputaciones de Álava y Guipúzcoa.
El portavoz del PNV, Josu Erkoreka, y el responsable de Economía de este partido, Pedro Azpiazu, trasladaron ayer a Elena Salgado su preocupación por la pronta tramitaciónenel Congreso de la proposición de ley del Parlamento vasco que defiende la modificación de la Ley Orgánica del Poder Judicial y la del Tribunal Constitucional para que las normas forales tengan rango de ley y, por tanto, estén protegidas frente a la permanente judicialización. En el PNV no se quieren nuevas desautorizaciones judiciales de las llamadas vacaciones fiscales vascas. Esta propuesta llega de la Cámara vasca avalada por la unanimidad de los grupos parlamentarios.
Aparte del blindaje de las normas forales, los nacionalistas vascos han pedido a Salgado que abone a la Diputación de Álava los 456 millones de euros en concepto de IVA de vehículos importados, una deuda reconocida por la Junta Arbitral. Por último, le emplazaron a prestar la cobertura financiera necesaria a la transferencia de las políticas activas de empleo.
Pactos con la izquierda
El Gobierno no desea que el conocimiento de esta negociación obstaculice el pacto con los grupos de izquierdas, sobre todo porque José Luis Rodríguez Zapatero desea exprimir hasta el final su apuesta por la llamada geometría variable que, en este caso, descansaría en un acuerdo presupuestario con IU-IC, ERC, BNG y CC, respaldado por el PNV como elementomoderador. De ahí que el Ejecutivo tampoco haya lanzado las campanas al vuelo.
El pacto con los nacionalistas tiene especial relieve en el capítulo de la reforma fiscal que incorporarán los Presupuestos, ya que es donde más distancia puede haber con Izquierda Unida y Esquerra Republicana.