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Resultados

Renault perdió 2.712 millones en el primer semestre

Renault perdió 2.712 millones de euros en el primer semestre, cuando en el mismo periodo de 2008 había tenido 1.581 millones de euros de beneficios, anunció hoy el fabricante francés, que no obstante puso el acento en que la situación en el segundo trimestre ha sido menos mala que en el primero.

En las pérdidas de la primera mitad del año de Renault pesaron la "caída brutal del conjunto de los mercados", y más todavía los resultados negativos de sus filiales y grupos asociados, que gravaron sus cuentas con 1.584 millones de euros, de los cuales 1.217 millones por Nissan, 196 millones por AB Volvo y 182 millones por la rusa AvtoVAZ, precisó el grupo francés en un comunicado.

La empresa señaló que la contribución negativa de su socio japonés Nissan se concentró en el primer trimestre (-1.151 millones de euros) para atenuarse ostensiblemente en el segundo (-60 millones).

El hundimiento de las ventas de Renault tuvo su reflejo en un resultado de explotación negativo de 946 millones de euros entre enero y junio de este año, comparados con los 845 millones positivos que había conseguido en el mismo periodo del pasado año. Esa primera cifra integra 297 millones de euros de depreciaciones de activos por la revisión a la baja de los volúmenes de coches.

El margen operativo también cayó a números rojos en la primera mitad del año a altura de 620 millones de euros, frente a los 865 millones positivos entre enero y junio de 2008.

La actividad automovilística representó 869 millones de euros negativos en ese margen operativo, un empeoramiento de 1.467 millones respecto al periodo comparable del pasado año que se explica sobre todo por el descalabro del volumen de coches vendidos (978 millones), pero también por el deterioro del precio medio y de los medios comerciales (385 millones).

El negocio de financiación, por su parte, mostró "capacidad de resistencia", en palabras del constructor francés, ya que consiguió un margen operativo de 249 millones de euros, equivalente al 28% de su facturación.

La facturación de Renault, por su parte, sufrió un descenso del 23,7% a 15.991 millones de euros, aunque si se descuenta el impacto de las variaciones de tipo de cambio la baja fue del 21,5%.

La división automovilística fue la que tuvo la mayor caída, un 24,2% hasta 15.101 millones de euros, aunque Renault insistió en poner en evidencia signos de un menor deterioro desde abril: la disminución del volumen de negocios, que había sido del 30,8% en el primer trimestre, pasó a ser del 16,9% en el segundo.

La filial de financiación contribuyó a los ingresos con 890 millones de euros, que suponen un descenso del 14,7%.

El presidente de la empresa, Carlos Gohsn, se esforzó en pasar el mensaje de que como desde julio de 2008 habían "anticipado la crisis (...) ahora Renault resiste" y la mejor prueba es el flujo de caja "significativamente positivo", con 848 millones de euros en la primera mitad del año, en buena medida por el bajón del 25% de los gastos en investigación y desarrollo respecto al primer semestre de 2007.

El endeudamiento disminuyó en 708 millones de euros para quedar en 7.236 millones el 30 de junio, pero en términos relativos eso suponía un 43,7% de los capitales propios, es decir más que el 40,9% que se constataba el 31 de diciembre de 2008.

En cuanto a la liquidez, la división automovilística disponía al terminar junio de 3.400 millones de euros de tesorería y de 4.200 millones de líneas de créditos disponibles, mientras la filial financiera tenía 5.400 millones.

Por lo que respecta a los, el grupo francés confirmó que espera cerrar el año con un flujo de caja libre positivo y con una cuota de mercado superior a la de 2008, sin más precisiones sobre la caída de las ventas o los resultados.

Renault, en todo caso, no ve tan negro el mercado mundial del automóvil como lo había pintado, ya que espera un retroceso del 12% respecto al ejercicio pasado (ya no del 15%) con más de 57 millones de unidades vendidas.

Sobre el mercado europeo, que es su mercado doméstico, espera que después de un descenso del 13,7% en el primer semestre, en el segundo el descenso será muy inferior, de forma que la contracción en el conjunto del año se situará en el 8%.

En ese contexto, el fabricante francés confía en beneficiarse de los lanzamientos de nuevos coches o versiones.

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