_
_
_
_
Salvador Ordóñez

"La universidad volverá a liderar el cambio si hace falta"

Cada verano, los cursos de la Menéndez Pelayo dan cabida a voces destacadas de la ciencia y las humanidades.

Se describe como "un hombre de ciencias". Un título avalado, sin duda, por su currículum: doctor en Ciencias Geológicas, catedrático de Petrología y Geoquímica, casi 30 publicaciones en revistas incluidas en el Science Citation Index Expanded y un centenar más en otras tantas cabeceras, investigaciones y proyectos varios, etcétera. Pero Salvador Ordóñez se reconoce, sobre todo, en su vínculo con el ámbito universitario. Como docente, como rector de la Universidad de Alicante entre 2001 y 2004, como secretario de Estado de Universidades e Investigación durante dos años bajo el primer Gobierno de Rodríguez Zapatero y, ahora, al frente de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), la trayectoria profesional de este asturiano siempre ha tenido conexión con la educación superior. "No sé hacer otra cosa", admite.

Algunos reprochan a la universidad un enfoque excesivamente academicista. Dicen que se ha distanciado de las demandas sociales, ¿le parece una crítica justa? ¿Puede verdaderamente esta institución abordar problemas reales y aportar soluciones?

Deberíamos esforzarnos en aportar algo. Es verdad que muchas veces, sin darnos cuenta, en nuestro aspecto académico, nos deslizamos peligrosamente fuera de lo que sería el contacto con la sociedad. Pero siempre volvemos a retomar el camino. Si se habla de innovación y productividad, detrás de ellas están la formación y la investigación. Dos elementos que definen exactamente la misión esencial de la universidad: formar a los futuros profesionales, investigar y trasladar el conocimiento a la sociedad. Puede parecer que estamos ensimismados, pero, como conjunto, no hay ninguna universidad española que se encuentre ensimismada. Todas pretendemos tener repercusión en el exterior.

¿Ha perdido la universidad influencia en favor de otros foros o aún tiene capacidad para liderar movimientos?

En la época de la transición política y de la lucha por las libertades, la universidad jugó un papel muy importante. En este momento han aparecido nuevos foros, pero no pongamos a prueba a la universidad. Estoy convencido de que volverá a liderar el cambio siempre que haga falta. La universidad está siempre ahí y responde cuando se la solicita.

Fue precisamente durante la transición española que el poeta José Hierro definió la UIMP como una "isla de libertad", ¿se mantiene ese espíritu?

En la etapa más dura del franquismo, la UIMP transmitía cierta sensación de apertura, sobre todo por su carácter internacional con los cursos de español para extranjeros. Dentro del actual sistema democrático, la libertad está en todos los sitios. No obstante, seguimos siendo un punto para el debate abierto y que permite expresar todas las opiniones.

¿Le ha resultado muy diferente dirigir la UIMP, con una oferta casi exclusiva de cursos de verano y otros programas extraordinarios, respecto a la gestión de una universidad tradicional?

El rectorado de la Universidad de Alicante fue un proceso precioso y sigo teniéndola en el corazón. Pero la UIMP es como un premio en mi etapa madura de profesor. Es una suerte, porque yo soy una persona de formación fundamentalmente científica y aquí he tenido ocasión de relacionarme con el mundo de las letras, de la cultura.

En 2009, la crisis económica se cuela en la programación de la UIMP como uno de los ejes principales de los cursos de verano, ¿con qué vocación se aproximan a esta cuestión?

El argumento central es qué vamos a hacer a la salida de esta coyuntura. De toda crisis se sale. Lo que hay que intentar es buscar fórmulas para no volver a repetir la situación. El objetivo es profundizar en esa línea y analizar las nuevas formas de crecimiento. En los debates, arrojaremos luz sobre este tema.

A raíz del descalabro de ciertos sectores económicos, la I+D ha ganado protagonismo en el discurso político. En 2004, usted ya escribió sobre la necesidad de un sistema científico y tecnológico más eficaz, ¿hemos avanzado algo en estos cinco años?

El crecimiento de las inversiones en I+D por parte del Estado ha sido espectacular desde entonces. El sector privado también se ha esforzado mucho. Aun así tenemos que incrementar este apoyo, porque cuantos más recursos se destinen a la I+D y más se focalice en asuntos que pueden ser transferidos con cierta rapidez al sector productivo, más cerca estaremos de alcanzar un modelo de crecimiento sostenible.

Algunas escuelas de negocios hacen autocrítica y analizan su responsabilidad en la crisis de valores de la élite directiva. Y la universidad, ¿acometerá una evaluación similar?

La introspección acerca de cuál es el papel de la universidad y qué principios debemos transmitir es necesaria. No hemos reflexionado suficientemente sobre este asunto, pero convendría darle una vuelta. Efectivamente ha habido mala praxis y deben retomarse valores como la solidaridad y el trabajo bien hecho. No se han perdido, pero se adormecen. Quizá el modelo de los años ochenta, del yuppie que con muy poco esfuerzo daba un pelotazo, hay que suprimirlo por el valor de la persona, el respeto al medio ambiente, etcétera.

"No perder el tren tecnológico y, si es posible, encabezarlo"

La UIMP ha volcado todo su empeño en la reconversión tecnológica. Es un envite de futuro que realiza a través de varias iniciativas. La más relevante, quizá, la Biblioteca Digital.En ella se almacenan documentos, como las voces del político Enrique Tierno Galván hablando sobre La ética de la sociedad civil (en 1984) o del pintor Antonio López y del escultor Eduardo Chillida impartiendo el curso Testimonio de los creadores (en 1985), así como otros sonidos y textos de conferencias ilustres. Testimonios de valor histórico y académico a los que se puede acceder a través de la red (www.bduimp.es).La digitalización de estos fondos responde a una estrategia de vanguardia, capitaneada por Salvador Ordóñez, que asegura que se trata de "no perder el tren de la tecnología y el conocimiento globalizado e, incluso, si es posible, encabezarlo".

Archivado En

_
_